La poca productividad que tienen Newell´s Old Boys y Rosario Central en sus inferiores de fútbol sigue generando sorpresa. Los jugadores cada vez más jóvenes suben a primera división, son vendidos en temprana edad  y por ende no hay resultados en las categorías formadoras de profesionales.

Para el responsable de la Asociación Rosarina de Fútbol, Mario Gianmaría, la decadencia tiene una explicación: “Estamos haciendo una carnicería con las inferiores. Hay  una picadora de carne con las divisiones inferiores donde se están buscando ya jugadores de 12 ó 13 años”.

“La semana pasada se fue un chico de 10 años a Boca y actualmente los entrenadores de River se lo quieren robar”, aseguró el mandamás del fútbol local.

El promover jugadores a la máxima categoría no es el único inconveniente por el cual se desmantelan las inferiores, para Gianmaría va más allá la cuestión. Newell´s y Central durante mucho tiempo evadieron el porcentaje que les correspondían a los clubes por derecho de formación. Eso motivo a que las instituciones rosarinas realicen convenios con equipos de Buenos Aires.

“Los dos clubes disfrutaron durante muchos años el privilegio de ser las únicas alternativas que tenían los jugadores amateurs de Rosario y su zona para llegar al profesionalismo”, señaló Gianmaría.

La mayoría de las instituciones deportivas de nuestra ciudad ya tienen convenios con algunas de Buenos Aires: Juan XXIII con Vélez, Coronel Aguirre con San Lorenzo y así otras más. Entonces, los clubes tienen otras alternativas, además del aliciente que implica que Newell´s y Central muchas veces no cumplían con los convenios de formación de jugadores.

Pero el Presidente de la Rosarina profundizó aun más sus argumentos por los cuales las inferiores de los “grandes” de Rosario se están desmantelando. “En algunos casos, los dirigentes de los clubes amateurs estaban condicionados para llevar jugadores tanto a Newell´s como Central, ya que tenían que firmar poderes de representación con los barrabravas para quedarse en el club. Muchas veces además los barras representaban a los jugadores”, apuntó Gianmaría.