La empresa Aguas Santafesinas comunicó que se reparó la bomba que ayer a la tarde dejó de funcionar. Se trata del principal dispositivo que opera en la planta potabilizadora y ponía en riesgo el servicio en varios barrios de Rosario. Sin embargo, no descartaron inconvenientes en la presión de agua debido a la bajante del río Paraná.
El responsable de comunicación de Aguas, Guillermo Lanfranco, informó este miércoles por Radio 2 que se logró poner en servicio la bomba rota. “Es una de las ocho que operan para extraer agua. Ayer tuvo problemas y hubo que desarmarla y cerca de la medianoche empezó a funcionar normalmente”.
Este miércoles el panorama del servicio de agua potable se volvió negro. Vecinos de Rivarola al 7000 decidieron retuvieron a un empleado de Assa cansados de la escasa presión de agua en la zona. Y sobre llovido, mojado: se rompió la principal bomba de extracción de agua con la amenaza de que el malestar se extendiera por el oeste, el sur y el noroeste.
De acuerdo a Lanfranco, la reparación de la bomba aleja este fantasma, sin embargo, no descartó algunos inconvenientes: “Puede haber problemas en la presión porque hay una reducción del 10 por ciento teniendo en cuenta la bajante del Paraná. Las bombas no pueden trabajar igual cuando hay dos metros menos de agua”.
Los barrios más afectados son “los que más lejos están de las zonas de bombeo”, observó y garantizó la provisión de agua mediante cubas. “En los barrios que asistíamos en el verano con cubas tuvimos que volver con lo mismo, igual que en el verano”, indicó. “En esta época el río debería estar creciendo pero este año, vamos contracorriente”, ironizó.
El responsable de comunicación de Aguas, Guillermo Lanfranco, informó este miércoles por Radio 2 que se logró poner en servicio la bomba rota. “Es una de las ocho que operan para extraer agua. Ayer tuvo problemas y hubo que desarmarla y cerca de la medianoche empezó a funcionar normalmente”.
Este miércoles el panorama del servicio de agua potable se volvió negro. Vecinos de Rivarola al 7000 decidieron retuvieron a un empleado de Assa cansados de la escasa presión de agua en la zona. Y sobre llovido, mojado: se rompió la principal bomba de extracción de agua con la amenaza de que el malestar se extendiera por el oeste, el sur y el noroeste.
De acuerdo a Lanfranco, la reparación de la bomba aleja este fantasma, sin embargo, no descartó algunos inconvenientes: “Puede haber problemas en la presión porque hay una reducción del 10 por ciento teniendo en cuenta la bajante del Paraná. Las bombas no pueden trabajar igual cuando hay dos metros menos de agua”.
Los barrios más afectados son “los que más lejos están de las zonas de bombeo”, observó y garantizó la provisión de agua mediante cubas. “En los barrios que asistíamos en el verano con cubas tuvimos que volver con lo mismo, igual que en el verano”, indicó. “En esta época el río debería estar creciendo pero este año, vamos contracorriente”, ironizó.


