La noche de Bailando por un sueño tuvo otra vez como epicentro el regreso de Matías Alé. Alejado de la pista por una lesión y reemplazado por Marcelo Teto Medina, Alé regresó con chistes casi todos malos como los de siempre.

Es que el novio de Graciela Alfano hizo su acting de por lo menos 18 minutos que siempre termina igual: con un beso con su pareja. Por suerte, el mini show de Alé llegó a su fin y se dignó a bailar junto a su soñadora Gisela Bernal. El ritmo era de milonga y aunque no fueron muy buenos, resultaron calificados con un generoso 10 de nada más y nada menos que de Alfano, un 5 de Jorge Lafauci y un 9 de Gerardo Sofovich.

Luego salieron a escena Iliana Calabró y Maximiliano D’Iorio, con la actriz cargando el álbum de fotos de su casamiento en donde se veían a varias figuras del espectáculo en sus mejores años. Pero más allá de la previa el jurado no los acompañó y fueron calificados con apenas 21 puntos, lo que no impidió que la Calabró repartiera sus acostumbrados regalos (esta vez fueron todo tipo de quesos) y que D’Iorio también hiciera su habitual striptease.

La tercera pareja fue Celina Rucci y Matías Sayago y tuvieron una performance impecable, consiguiendo uno de los mejores resultados de la noche, nada menos que 27. Nota que equiparó a la de la dupla de Florencia de la V y superó a una de las mejores postulantes: Liz Solari 26 puntos.

La última presentación fue la de José Maria Listorti y Estefanía Canedi que se llevaron junto con el dúo de Calabró y D´Iorio el puntaje más bajo: 21