El canciller brasileño, Celso Amorim, afirmó este lunes que Brasil está dispuesto, si así se lo piden, a mediar entre Colombia y Venezuela para reducir las tensiones que llevaron al presidente venezolano, Hugo Chávez, a alertar sobre una posible guerra.

"Brasil siempre que puede intenta aproximar y dialogar con los dos lados, y el espíritu nuestro siempre es el de facilitar el diálogo, pero eso no depende sólo de nosotros", dijo Amorim en declaraciones a Efe en Río de Janeiro.

El ministro aclaró que cualquier mediación depende de que sea solicitada por ambos países.

Pese a no citar fechas, circunstancias ni lugares, Amorim dijo que Brasil espera que Chávez pueda tener un encuentro con el presidente colombiano, Álvaro Uribe, para que intenten solucionar las divergencias entre ambos países.

"Vamos a ver si surge una oportunidad para que los dos puedan estar juntos, quién sabe", dijo Amorim, tras recordar que el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, recientemente se reunió con Chávez y una semana antes lo había hecho con Uribe.

En unas declaraciones citadas la semana pasada por un diario local, Lula dijo que confía en que Chávez terminará entendiéndose con Uribe y que pretende promover una reunión entre ambos el 26 de noviembre próximo en la ciudad brasileña de Manaos.

Lula ha invitado a Manaos a los presidentes de los países amazónicos, entre ellos Colombia y Venezuela, para una cumbre en la que definirán posiciones conjuntas de cara a la Conferencia del Clima que se celebrará en diciembre en Copenhague.

Las ya tensas relaciones entre Colombia y Venezuela se complicaron aún más el domingo luego de que Chávez le pidiera a su país "prepararse para la guerra" ante la posibilidad de una agresión que, en su opinión, podría gestarse desde Estados Unidos.

En su programa dominical "Aló Presidente", Chávez hizo un llamado a los militares y a los civiles venezolanos a "prepararse para la guerra", en una advertencia a los gobiernos de Colombia y EE.UU.

La advertencia fue una respuesta a la firma de un convenio militar que prevé el uso de hasta siete bases colombianas por las fuerzas estadounidenses, lo que Chávez considera una "amenaza" para la seguridad regional.

Fuemte: EFE