Este martes los policías de la comisaría 15ª se llevaron una sorpresa cuando en medio de un allanamiento en Doctor Riva al 2100, por el cual pretendían encontrar una moto robada, se toparon con varios paquetes de droga y un arma de fuego. En la vivienda funcionaba un búnker. La policía logró detener a uno de los dos hombres que lo atendían en ese momento.
Según fuentes policiales, el operativo realizado en conjunto con el Grupo de Infantería de Respuesta Inmediata (Giri) –como es habitual en este tipo de procedimientos– se llevó a cabo este martes a las 14.35.
Con la orden de allanamiento del juzgado de la 10ª Nominación, los efectivos irrumpieron en el domicilio de la esquina de Doctor Riva y Oroño, una estructura precaria con techos de chapa. En el lugar, dos hombres, uno de 32 años y otro de 19, manejaban un quiosco de drogas.
La policía no halló el rodado robado pero encontró un botín mayor: 45 tapitas termoselladas de cocaína, 31 bolsitas de marihuana, una libreta con anotaciones y 1.140 pesos.
Pese a que los efectivos cerraron la zona con un vallado perimetral, uno de los soldaditos, el más joven, logró huir por los techos. En el camino se deshizo un revólver calibre 22.
El otro sospechoso fue detenido y el caso remitido a la Brigada de Drogas.
Según fuentes policiales, el operativo realizado en conjunto con el Grupo de Infantería de Respuesta Inmediata (Giri) –como es habitual en este tipo de procedimientos– se llevó a cabo este martes a las 14.35.
Con la orden de allanamiento del juzgado de la 10ª Nominación, los efectivos irrumpieron en el domicilio de la esquina de Doctor Riva y Oroño, una estructura precaria con techos de chapa. En el lugar, dos hombres, uno de 32 años y otro de 19, manejaban un quiosco de drogas.
La policía no halló el rodado robado pero encontró un botín mayor: 45 tapitas termoselladas de cocaína, 31 bolsitas de marihuana, una libreta con anotaciones y 1.140 pesos.
Pese a que los efectivos cerraron la zona con un vallado perimetral, uno de los soldaditos, el más joven, logró huir por los techos. En el camino se deshizo un revólver calibre 22.
El otro sospechoso fue detenido y el caso remitido a la Brigada de Drogas.