El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, aseguró este jueves que "la retirada de las tropas (de Irak) es un objetivo que comparten todos los americanos", pero subrayó que hacerlo ahora sería un "desastre".

En una conferencia de prensa que coincide con la publicación del informe sobre la situación en Irak que la Casa Blanca elaboró para el Congreso, el presidente reiteró la capacidad de Estados Unidos para lograr sus propósitos en ese país.

"Podemos y debemos tener éxito en Irak", dijo Bush.

El informe reconoce que la situación de seguridad en Irak es "muy compleja" y representa un "gran reto" al tiempo que considera que el gobierno iraquí ha tenido una actuación desigual a la hora de cumplir las metas impuestas por Estados Unidos

El presidente subrayó que entre las prioridades de de su país se encuentra el "ayudar a los iraquíes a proteger a sus ciudadanos de los extremistas" y destacó el hecho de que, según se recoge en el informe publicado hoy se hayan registrado avances en ocho áreas.

En otras ocho áreas "es necesario hacer más" y en otras dos los resultados son demasiado mixtos como para pronunciarse.

Entre las áreas que el presidente indicó que no se han cumplido los objetivos, subrayó el hecho de que no se haya conseguido llegar a un acuerdo para decidir cómo se reparten los beneficios que el país obtiene del petróleo.

Bush destacó que en este momento, Estados Unidos se encuentra en una mejor posición para determinar "dónde se necesita hacer ajustes" para conseguir avances en Irak.

En todo momento, el presidente hizo hincapié en que el informe presentado hoy tiene carácter "preliminar" y es necesario esperar al definitivo que se presentará el 15 de septiembre antes de tomar una decisión sobre algún posible cambio de estrategia o de regreso de las tropas.

Actuar antes de ello, insistió, "sería peligroso para Irak, para la región y para Estados Unidos, y equivaldría a dar la ventaja a grupos como Al Qaeda (...) nos arriesgaríamos a tener que volver más tarde para enfrentarnos a un enemigo aún más peligroso".

Bush recordó que, a su juicio, la guerra que se libra en Irak afecta a toda la región y Oriente Medio "se la juega" en Irak.

En este sentido, anunció que enviará a principios de agosto a sus secretarios de Estado, Condoleezza Rice, y de Defensa, Robert Gates, a la región para consultar con los gobiernos aliados y "garantizarles que Oriente Medio sigue siendo una prioridad".

Fuente: EFE