El ex Beatle Paul McCartney habría aceptado pagarle 32 millones de libras esterlinas (alrededor de 58 millones de dólares) a su ex esposa, la modelo inglesa Heather Mills, como parte de un acuerdo de divorcio.

La noticia, publicada por el dominical News of the World, detalla que Mills se quedará, además, con una exclusiva mansión de McCartney en el oeste de Londres (valuada en 8 millones de dólares), y con una propiedad en Beverly Hills, Los Angeles, cuyo precio estimado ronda los 12 millones de dólares.

Según el News of the World, McCartney aceptó pagar ese dinero y entregar dos de sus propiedades a la modelo, porque está "desesperado" para que los detalles de su separación no salgan a la luz.

Un despacho de Ansa agregó que las hijas del ex Beatle con Linda McCartney, la diseñadora Stella, de 35 años, y su hermana, la fotógrafa Mary, de 37, dijeron estar "furiosas" con el acuerdo de separación, que beneficia a Mills.

Ambas mujeres dijeron que quieren que la modelo –que contrajo enlace con el músico en 2002 y que como producto de esa relación tienen una hija, Beatriz, de dos años– sea desacreditada públicamente en la corte.

En esa misma línea, el dominical que hoy difundió el acuerdo, calculó que Mills, de 38 años, cobrará un equivalente a 2.000 dólares por cada hora de su matrimonio de 4 años con McCartney, de 64 años.

"El mismo pago que recibe una prostituta", escribió con sarcasmo al lanzar una campaña nacional para desprestigiar a Mills.