A una semana de iniciado el conflicto de gendarmes y prefectos, que estalló tras un recorte de sueldos aplicado tras un decreto presidencial, la protesta pierde fuerza. Son pocos los oficiales que aún reclaman en Buenos Aires –no había nadie frente al edificio Guardacostas, apenas un grupo acampando frente al edificio Centinela– en tanto que en Rosario este martes ya se había desactivado la movida en avenida Belgrano al 300.
"La gente se retiró, esperaremos a fin de mes, a ver si la respuesta que nos da el gobierno es satisfactoria", aseguró José Luis, vocero de Prefectura, en diálogo con Radio2. Confió que se analizaron dos propuestas: creerle al gobierno y esperar a fin de mes o mantener la protesta hast fin de mes. "A última hora se consensuó" no seguir con la movida, confió. "Hubo malestar en la gente, esperábamos que el gobierno nos citara para dialogar y discutir el tema", sostuvo. Aclaró que, pese a las informaciones difundidas, "ningún personal de Prefectura fue pasado a disponibilidad".
Este martes, en conferencia de prensa, el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, y el ministro de Economía, Hernán Lorenzino, rechazaron el pedido de esas fuerzas, que reclamaban básicos de 7000 pesos. En tanto que este miércoles trascendió que el hermano de la ministra Nilda Garré, Raúl Garré, quiern era jefe de Gabinete de Asesores de la cartera de Seguridad, renunció.
José Luis (Radio 2)
