La grasa que se acumula en las caderas y la cintura son una rica fuente de células que se pueden convertir en pluripotentes (iPS) más rápido que las de la piel, difundió la revista PNAS.

A diferencia de las células de la piel (fibroblastos) que demoran varias semanas antes de transformarse en pluripotentes, las grasas lo hacen con mayor celeridad y se pueden convertir en tejido muscular u óseo.

"Hemos identificado una gran fuente natural", escribió en Proceeding of the National Academy of Sciences (PNAS) el autor principal del estudio, Michael Longaker. Para llevarlas a un estado embrionario, su equipo introdujo cuatro genes en las células grasas.

La reprogramación celular, una técnica diseñada hace tan solo tres años, logra transformar una célula adulta en otra con propiedades similares a las de las células madre embrionarias. Es decir, capaces de dar lugar a todo tipo de tejidos, de ahí que se denominen células de pluripotencialidad inducida (iPS). El objetivo es que una vez controlado, el proceso sirva para tratar gran cantidad de problemas, desde cerrar una cicatriz a “fabricar” un hígado.

Fuente: Prensa Latina