En medio de un presente convulsionado, el director técnico de Rosario Central, Miguel Angel Russo, dirigió una nueva práctica del primer equipo. Luego de la misma, en conferencia de prensa, se solidarizó con los jugadores agredidos en el playón del Gigante de Arroyito tras la derrota con Douglas Haig y dio a entender que ambos continuarán en la institución. “Han entrenado en forma normal”, afirmó.
Tanto Casteglione como Yacuzzi expresaron ayer que analizaban la posibilidad de dejar el club. El primero dijo que hoy tomaría la decisión, el segundo que su familia le pide que deje la institución y que en Central la barra brava tiene demasiada presencia.
“Repudiamos lo del domingo y somos solidarios con los jugadores agredido”, dijo Russo, en la conferencia que se vio en vivo en el programa De 12 a 14, de El Tres.
Y sostuvo que lo necesita Central para salir de la actual situación es “es calma”. “Nosotros, desde lo deportivo, se la tenemos que dar con resultados”, agregó.
Para ello,consideró que “hay que tener temple, proyectos y achicar el margen de error”.
El entrenador consideró que el equipo juega “muy apurado” y que es preciso “bajar ansiedades”. El mensaje, aclaró, no es para los hinchas sino para el equipo.
“Queremos llegar demasiado rápido al arco. No sabemos trabajar los partidos; queremos definirlos demasiado rápido y hay errores individuales que nos cuestan muchísimo”, sumó.
Russo repudió los incidentes producidos ante Douglas Haig
