Un poquito de calma. Eso es lo que plantearon los dirigentes de Rosario Central, en la reunión extraordinaria de comisión directiva desarrollada anoche en la sede de calle Mitre.

Tras el regreso del presidente Norberto Speciale, quien se encontraba en el exterior al momento de los incidentes posteriores al traspié ante Douglas, y a raíz de los rumores sobre la fractura dentro de la conducción canalla, los directivos auriazules llevaron a cabo un cónclave en la sede.

Allí, luego de analizar minuciosamente el momento deportivo e institucional de Central, se consensuó que lo más aconsejable para este momento duro es aunar esfuerzos y "tirar todos para el mismo lado".

Así, se desestímó la posibilidad de la partida del grupo de dirigentes de la agrupación Raza Canalla, que eran liderados por Gonzalo Belloso hasta la renincia del manager  y que supuestamente iban a pedir el adelantamiento de las elecciones para el año que viene.

Además, los dirigentes plantearon sobre la mesa la idea de seguir apoyando a Miguel Ángel Russo y no trazarle ningún plazo, confiando en la capacidad del DT para levantar el mal pasar deportivo.