La inseguridad es un tema recurrente en la agenda pública, pero cuando le toca a los taxistas resurgen viejos proyectos para detener los asaltos contra los peones. Este jueves, cuando distintas agrupaciones de ese sector se movilizaron para reclamar mayores medidas de seguridad y amenazaron con un paro, el representantes de la Asociación de Titulares de Taxis Independientes (Atti), Mario Cesca, descalificó las medidas para combatir los robos tomadas hasta el momento. “Los patrullajes se lanzan después de un robo pero con el tiempo se van diluyendo porque nosotros no somos los únicos afectados por la inseguridad”, señaló a Radio 2. Además, apuntó que por el Mundial, la policía debe controlar las concentraciones de gente que se producen y “en esta época se están dando más robos; hay todos los días”. Por otro lado, sobre el proyecto para incorporar equipos de radiollamada a todos los coches, Cesca aseguró que “estos son proyectos que van quedando en los cajones” y que “con estos aparatitos se quiere parar un cáncer con una aspirina”. En cuanto a la posibilidad de realizar una medida de fuerza, señalo que es difícil tomar una decisión porque “sabemos que con un paro no se resuelve nada” pero que “algo hay que decirle a los compañeros y los familiares de las víctimas”. Aunque no descartó una acción ante lo que calificó una situación de “impotencia”. En el mismo tono, Horacio Boix, del Sindicato de Peones de Taxis, señaló: “Venimos protestando desde hace año y todas las quejas terminan en saco roto, es un tema de nunca acabar”. Los tacheros le pidieron a los miembros del Concejo Municipal, a los legisladores provinciales y al ministro de Gobierno, Roberto Rosúa, que se hagan eco de sus reclamos. “No estamos solos en este pedido, esto es algo que afecta a toda la sociedad no únicamente al sector de los taxistas. El tema de la inseguridad nos toca a todos”, expresó Boix.