La extraña mascota de una familia rosarina de zona sudoeste sigue dando que hablar. Tras la nota en De 12 a 14 (El Tres), la historia llegó a los medios nacionales e internacionales. Para algunos se trata del mítico chupacabras, para otros de un extraterrestre, y los especialistas aseguran que es un felino muerto. Lo único cierto es que se ve: el raro bicho cabe en una hoja tamaño A4, tiene garras y dientes y lleva largo tiempo sin vida.
Stella Maris, dueña del particular resto, contó este martes en De 12 a 14 que su hijo “recorre todas las provincias con los camiones y lo encontró en el norte de Santa Fe hace dos años”, en la localidad de Vera. Así como llegó a Rosario, el animal fue introducido por la familia en una bolsa. "Aunque después lo guardamos fuera de la casa en una cajita de artesanía, y no lo mostramos más”, agregó la mujer.
También manifestó que después de un tiempo, su hija mayor decidió “subirlo a internet” y buscar información sobre el ejemplar en distintos lugares. Una de las tantas informaciones que logró recopilar la joven llegó desde México y expresa que “se puede observar que era un extraterrestre, estaba vivo y lo ahogaron”.
Sobre la increíble repercusión que tuvo la noticia, Stella Maris confesó que nunca la imaginó y agregó: “Me llamaron de Buenos Aires, vinieron de Télam (la agencia oficial de noticias) a mi casa, también habló una persona de la Nasa con mi hija a través de Facebook”.
La opinión de un profesional
El profesor Jorge Martí, jefe de Museología y Taxidermia en el Museo de Ciencias Naturales "Dr. Ángel Gallardo" de Rosario, también pasó por los estudios de De 12 a 14 y analizó el esqueleto. “Mi diagnóstico es que se trata de un felino, un animal joven, de corta edad”, manifestó.
De esta manera, el especialista descartó la posibilidad de que el pequeño animal hallado sea el mítico chupacabras o un monstruo alienígena, como sostenían otras versiones. “Estamos hablando de un felino que puede ser un gato montés, o un gato onza”, dijo, especies fáciles de encontrar en la cuña boscosa.
Sobre la preservación del animal muerto en ese estado, Martí detalló que “se trata de un caso de momificación natural”, diferente a la fosilización y propiciada por “la sequía, el sol, la humedad pendiente, que hacen que se conserven así”, concluyó.