Evo Morales fue reelecto por un amplio margen como presidente de Bolivia este domingo y se aseguró más de dos tercios de la Cámara alta, en las primeras elecciones realizadas bajo el imperio de la nueva Constitución. También fueron aprobados los regímenes autonómicos para los departamentos que aún no los habían votado. Además, por primera vez pudieron sufragar los bolivianos residentes en el exterior, de los cuales la colonia más numerosa está en la Argentina.

Los principales opositores de Morales reconocieron por la noche la derrota y prometieron desempeñar una oposición constructiva y responsable con los bolivianos que les apoyaron, tras el resultado de los sondeos, que daba ganador al actual mandatario con más del 60 por ciento de las preferencias.

El líder del Plan Progreso para Bolivia-Convergencia Nacional (PPB-CN), el ex prefecto Manfred Reyes Villa, agradeció desde Santa Cruz a los bolivianos que apoyaron "una visión de país que quiere recuperar la república y fortalecer el estado de derecho".

"Ha sido una batalla dura en contra de la mentira, de la persecución política", dijo Reyes Villa en referencia a la campaña electoral.

El candidato de PPB-CN, segundo en las votaciones pero a casi cuarenta puntos de Morales según los sondeos, prometió que su partido será "la trinchera del equilibro de la democracia", y aseguró que los diputados de su partido serán una "oposición constructiva".

El tercero en la carrera electoral, el candidato de Unidad Nacional (UN), el empresario Samuel Doria Medina, reconoció la derrota en una conferencia de prensa desde su cuartel general en La Paz.

"Hay una idea clara con los primeros resultados: Bolivia ha decidido dar una nueva oportunidad a Evo Morales", dijo el candidato de UN, a la vez que recordó que los problemas que denunció su partido, como la falta de empleo o el incremento de la producción de hoja de coca, "se pueden agravar".

El candidato de Alianza Social (AS), el quechua René Joaquino, admitió a la red Unitel desde Potosí (suroeste) que "esperaba mucho más", pero se mostró muy contento de los porcentajes obtenidos.

El líder de AS destacó el posible senador que su agrupación podría conseguir por Potosí, que va a jugar un papel histórico.

Joaquino, ex alcalde de Potosí, reivindicó a su partido como el único proyecto emergente del panorama político boliviano, un instrumento que hizo nacer la esperanza en Bolivia y que "se está preparando" para las municipales y prefecturales del próximo año.

Masiva votación en la Argentina

También por primera vez pudieron votar los bolivianos residentes en el exterior, de los cuales la colonia más numerosa está en la Argentina, donde 89.953 ciudadanos estaban habilitados para emitir sus sufragios en la ciudad de Buenos Aires, en varias ciudades del conurbano bonaerense y en Mendoza, San Salvador, San Pedro y Perico, estas tres últimas en Jujuy.

El cierre de la votación se había aplazado en el estadio del club San Lorenzo de Almagro, uno de los dos centros de votación habilitados en la ciudad de Buenos Aires, y hubo "muchos problemas" para organizar el acto, según admitió el ministro de Gobierno, Alfredo Rada, en declaraciones a la televisora estatal.

En San Lorenzo estaban habilitados para votar 35.998 ciudadanos en 155 mesas, en tanto en el club Deportivo Español estaban inscriptos 21.415 en 91 mesas.

Desde temprano ambos estadios se mostraron colmados de gente, ya que la mayoría de los inscriptos fueron a votar acompañados por sus familias y, más allá de los inconvenientes, tomaron a los comicios como un acto festivo.

"La gente boliviana se ha manifestado a hacer el voto en esta fiesta democrática y lo está llevando bien, se ve a la gente muy animada y muy contenta porque mucha gente está votando por primera vez en su vida; esa alegría es lo que destaco por encima de los problemas", describió a la agencia Télam Efraín Castro, periodista boliviano radicado en el país.