Al no del agro, desde sus más variadas representaciones (Sociedad Rural, Federación Agraria Argentina, Confederaciones Rurales Argentina y Coninagro) se le suma el de los especialistas en temas productivos y de consumo. En diálogo con Radio 2, el analista agropecuario Carlos Marín Moreno y Pedro Busetti de la organización en Defensa de los Usuarios y Consumidores (DEUCO) pusieron en duda el esquema de retenciones con el que el gobierno nacional intentará frenar y mantener los precios de algunos alimentos de la canasta básica.

El ingeniero Marín Moreno se mostró contundente: “Estos sistemas de subsidios cruzados para crear fondos diferenciales de distribución entre productores agropecuarios y lecheros son difíciles de aplicar en la realidad. En mi opinión se trata de una medida recaudatoria que en parte se puede concretar con el sólo fin electorista”.

Según el especialista, el precio de la soja y del trigo en el mercado internacional corre peligro de sufrir un decaimiento debido al impulso productivo que Estados Unidos está analizando concretar en pocos meses. “Se está dando un cambio de variables a nivel internacional. No se puede seguir pensando que al campo le va muy bien y que tendrá cosechas record porque el stock de soja en el mundo crece, el gobierno estadounidense está considerando la ampliación de su producción con lo que al bajar los precios, la retención al sector va a ser malísima”.

En cuanto a la postura de los consumidores sobre el financiamiento a los sectores alimenticios para controlar el aumento de los precios, Pedro Busetti de Deuco, abrió un interrogante: “Coincidimos con el gobierno en que haya estabilidad de precios pero preferimos que se prevengan los mecanismos que permiten la especulación de los mismos”, manifestó. Y puso como ejemplo los vaivenes en el precio del pollo: “En noviembre estaba en cuatro pesos y al mes llegó a cinco pero ahora volvió a bajar, en una clara actitud especulativa de un sector”.

“Hay que tener en cuenta a qué sector se quiere favorecer con este subsidio y las razones que provocan el aumento de los precios en los alimentos”, advirtió Busetti, quien deslizó: “Hay que ser cautos porque cuando el gobierno prohibió la exportación de carne, el precio del ganado en pie bajó pero no el precio al consumidor que incluso aumentó un 4,9 por ciento”.