"La cancha no es tan rápida, nos favorece". Ese fue el diagnóstico de Alberto Luli Mancini, capitán del equipo argentino de Copa Davis, luego del primer entrenamiento en Rusia, donde el viernes se comenzará a jugar la final del tradicional torneo de tenis entre nacionales.

Pese a que la cancha no es tan veloz como esperaban, los argentinos sí observaron un inconveniente en el pique bajo, y a veces irregular, en la superficie de la pista montada en el estadio olímpico de Moscú.

"Tiene madera abajo, y se muere un poco el pique de la pelota. No es pareja, hay lugares en los que pica diferente. Pero es cuestión de adaptarse. ¿Cómo se contrarresta eso? Con talento", agregó Mancini, que ve necesarias "unas horas más para adaptarse".

Enrique Morea, presidente de la Asociación Argentina de Tenis (AAT), dijo que la cancha es "rápida". Aunque enseguida aclaró "que los jugadores tienen experiencia, saben adaptarse".

Mancini no quiso adelantar el equipo, en el que lo único seguro es David Nalbandian como primer singlista. "Me gustaría tener el martes a la noche el equipo en la cabeza, y, más importante, que esté en la cabeza de los chicos. Tenemos chances de ganar esta final, aun cuando no seamos favoritos".