El ex presidente Fernando de la Rúa negó este miércoles ante la justicia haber participado en una reunión en diciembre de 2001 en la que se habría dado la órden de reprimir a manifestantes y aseguró que existió "un golpe civil e institucional impulsado por el justicialismo bonaerense".

"No hubo ningún plan represivo, ni como presidente di la orden de reprimir", declaró De la Rúa en su indagatoria ante el juez federal Claudio Bonadío. Además, el radical insinuó que la responsabilidad podría ser de la Policía Federal.

Según sus abogados, el ex presidente afirmó y ofreció testimonios para demostrar que esa reunión nunca existió. Uno de los letrados que asisten a De la Rúa también indicó que fue la jueza María Servini de Cubría quien dió la órden de poner vallas alrededor de la Casa de Gobierno, ya que existía la presunción de que algunos manifestantes podían intentar ingresar al edificio.

Los patrocinantes del ex mandatario también explicaron que Carlos Ruckauf y Eduardo Duhalde no fueron nombrados por De la Rúa en su indagatoria en relación a los hechos de violencia.

Sin embargo, el ex mandatario sí recordó, según sus abogados, que Ruckauf había reclamado la instauración del estado de sitio.

El ex presidente de la Alianza que dejó la Casa Rosada en diciembre de 2001 ya había sido sobreseído por Bonadío, pero la Cámara Federal porteña revocó esa decisión, aunque sin procesar al ex mandatario.