Como lo anunciaron ayer, los trabajadores de Luz y Fuerza realizaban este viernes un cese de actividades en reclamo de una solución para los trabajadores que se desempeñan en la usina Sorrento. Luego de cortar el tránsito en Paraguay al 1100 -domicilio del sindicato- y arrojar bombas de estruendo y hacer tocar redoblantes, estaba prevista una audiencia general en la que evaluarían los pasos dados hasta el momento y el futuro del conflicto.

El secretario general de Luz y Fuerza de Rosario, Alfredo Romero, confirmó la alta participación de empleados de la Empresa Provincial de la Energía y de la usina Sorrento en la movilización; “Haremos una asamblea de todo el gremio para analizar el futuro de las 50 familias que dependen de la usina y que aún siguen sin cobrar sus sueldos desde hace dos meses”.

La medida de fuerza que sólo afectaba el servicio de atención al cliente, fue decidida ayer en solidaridad con los empleados de la usina Sorrento, que desde hace tiempo están en conflicto con la patronal. Según denuncian los trabajadores el socio mayoritario desea deshacerse de la empresa.