Gran cantidad de rosarinos se encuentran varados en la ciudad Puerto Iguazú debido a la protesta que llevan a cabo comerciantes y empresarios misioneros que, desde el lunes pasado, mantienen cortado el puente internacional Tancredo Neves.
“Llegamos el lunes a la mañana con la intención de cruzar la frontera alrededor de las 11. Pero como empezaron los cortes nos tuvimos que quedar acá”, contó Mariel, una rosarina que está en Puerto Iguazú, a Radio 2.
Los cortes se iniciaron ni bien el gobierno suspendió por 180 días la tasa migratoria que debían pagar los argentinos para salir del país con fines turísticos por vía fluvial, terrestre o marítima. Esta medida, que comenzó a regir el 14 del mes pasado, provocó airadas protestas con piquetes en las rutas principalmente de Salta y de Misiones.
La soñada escapada a las Cataratas de Mariel y su esposo terminó casi en una pesadilla cuando se dieron cuenta que los días pasaban y las posibilidades de cruzar a Foz do Iguazú se evaporaban una a una. “Donde estamos es una ciudad de frontera, con toda la desolación que eso implica, acá no hay mucho y sobre todo no es lo que elegimos”, relató Mariel.
La medida del Ejecutivo nacional suspende el decreto 1025/05, que obligaba a quienes salían del país por tierra o a través de un río a pagar cinco pesos. Además, gravaba los viajes a Uruguay por el Río de
“Entiendo que el reclamo es justo, todos los habitantes del lugar están de acuerdo con los cortes en el puente por el reclamo de la tasa migratoria y tengo entendido que piden una revisión de la tarifa del combustible. Pero ya que no podemos terminar el viaje como teníamos planeado lo que queremos es volver a Rosario”, lamentó Mariel desde Puerto Iguazú.
La mujer que viajó con su marido y un contingente de 60 personas ya pasó por el cambio de tres hoteles ya que son muchos los turistas que quedaron detenidos en esa localidad y la plaza de alojamiento no a abasto para cubrir la demanda. “El problema es que mañana ya tendríamos que partir y el corte de rutas no sólo afecta el paso a las Cataratas sino que también impide el regreso. Hay gente de Rosario, Buenos Aires y Tucumán que no tiene forma de volver”, agregó Mariel.
Aunque el viaje que en principio era de placer se terminó pareciendo a un recorrido por el tren fantasma Mariel agradeció haber tenido tiempo para conocer, aunque más no sea, las Cataratas desde el lado argentino. Igual aunque le propusieron cruzar la frontera a pie se resignó a terminar su estadía en Puerto Iguazú. “Nos hacían la propuesta de poder pasar a pie pero era de noche y preferimos no arriesgarnos”, agregó.
