Un hombre acusado de ser jefe de una banda de narcotraficantes y de haber participado del crimen de otro vendedor de drogas fue detenido este viernes en una iglesia de las afueras de Buenos Aires, adonde había ido a venerar a la virgen de Santa Rita.

Fuentes policiales indicaron que las fuerzas de seguridad habían montado una guardia en las inmediaciones de la iglesia Santa Rita porque sabían que Horacio Héctor Bustamante, que permanecía prófugo, iba a rezar todos los 22 de enero al mismo templo, ubicado en la localidad bonaerense de San Isidro.

El acusado, de 43 años, tenía una pistola en la cintura al momento de ser apresado por su supuesta vinculación con el crimen de su sobrino, Germán Bustamante, quien era líder de una banda de narcotraficantes del norte del cinturón urbano de Buenos Aires.

Este joven fue asesinado en diciembre pasado en el marco de una pelea por el negocio de la venta de drogas en asentamientos de la localidades bonaerenses de San Martín y Boulogne.

"Bustamante aprovechó la interna narco entre su sobrino y la banda de ´Los Gardelitos´ para tenderle una trampa, asesinarlo y quedarse con su parte del negocio de la droga", afirmó un investigador policial a la agencia estatal Télam.