Todavía hay gente buena en este mundo. Un colectivero sanjuanino encontró un maletín con casi dos millones de pesos mientras limpiaba el micro que recién había terminado de manejar y los devolvió a su dueño: un hombre que había ido a hacer negocios a la zona de Cuyo. La buena acción tuvo recompensa, aunque no tan alta: 300 pesos.

"Siempre creí que si encontraba plata no la iba a devolver. Pero cuando vi ese maletín lleno de fajos de billetes no dudé en dárselo a su dueño", contó Alberto Ríos, uno de los choferes de la línea 28 de la ciudad de San Juan, al Diario de Cuyo.
 
El episodio ocurrió el viernes pasado. El maletín, según el chofer, tenía en su interior muchos billetes entre pesos, dólares y euros. No lo supo entonces pero luego le contaron que, en total, sumaban unos 1.800.000 pesos.

El otro protagonista de esta historia es Carlos, el del gran olvido. Un sanjuanino que vive en Santa Fe. El hombre contó que el dinero pertenecía a la empresa en la que trabaja y que era para comprar tierras para plantar olivos. "Por una promesa cada vez que vengo a San Juan voy a la iglesia de Concepción. Cuando salí tomé el colectivo y me dejé el maletín", comentó.

¿Qué motivó al colectivero a devolver el dinero? "Pensaba que a lo mejor la plata era del trabajo del hombre y que si la perdía lo iban a echar. Después me asusté, pensé que podía ser robada y que iba a terminar preso. Pensé de todo, porque ¿cómo alguien se va a olvidar tanta plata?", planteó Alberto.

Poco después de su hallazgo, decidio dejar el maletín en la empresa de colectivos. Pero a pocos metros encontró en una esquina al hombre que se había bajado del colectivo. "Me preguntó si había encontrado algo. Le dije que sí y le di el maletín. Estaba asustado, me abrazó y me agradeció", contó el chofer. "Estas son cosas que te ponen a prueba. Yo empecé a trabajar a los 8 años, con mi papá. Siempre me decía que lo que es de uno es de uno, y lo que no, no. Creo que por eso no pensé en dejarme la plata", concluyó.