El miércoles fue un día de furia para una anestesista porteña. Al llegar al estacionamiento donde suele aparcar su auto en Recoleta notó que alguien había ocupado su lugar y no lo toleró: disparó siete veces contra el coche "usurpador". La policía la arrestó e internó en un hospital psiquiátrico pero este viernes intentó escaparse.
Según publicó La Nación, Marcelo Rocchetti, abogado del empresario damnificado, explicó que el chofer de su cliente estacionó el auto en el lugar asignado para la mujer porque, a su vez, el espacio del hombre había sido ocupado por otro automovilista.
“Mi cliente abona por un lugar asignado fijo y cuando llegó estaba ocupado por otro auto, entonces estacionó en el de al lado. Cuando llegó esta señora se puso un poco nerviosa, extrajo un arma y disparó en cuatro oportunidades contra el vehículo´”, relató el abogado e ironizó: “Se ve que tiene poca paciencia”.
La médica se llama María Verónica Ambertín y tras el episodio de violencia, fue encontrada por la policía en su departamento; a media cuadra del garaje. El juez de instrucción Fernando Klappenbach había ordenado un allanamiento en su domicilio en busca del arma –que resultó ser una pistola de aire comprimido– y remitido a un centro de salud mental privado, donde este viernes intentó fugarse pese a que su habitación contaba con custodia policial.
No sería la primera vez que Ambertín protagoniza un episodio agresivo: la anestesista tiene más de 20 causas penales por amenazas, de acuerdo a lo que una fuente policial confió a Télam. Además, había sido expulsada del country donde vivía sola por abrir fuego contra los guardias y sus propios vecinos según contó Alejandra Baratta, del tribunal de disciplina del barrio cerrado.
