Se produjeron dos asaltos con un denominador común: ladrones con datos precisos sobre la cantidad de dinero que iban a encontrar y llevarse. Los dos golpes se realizaron este lunes a la tarde en el centro de la ciudad en comercios en los que se iba a llevar adelante alguna operación que implicaba la presencia de elevadas sumas de dinero. En ninguno de los dos casos se han dado con los responsables.
Este lunes a las 19, un hombre ingresó armado a un local de venta de insumos de computación ubicado en 9 de julio 1177. Según destacó el periodista Héctor López en Radio 2, el hombre fue directamente a la caja fuerte de donde sustrajo unos 25 mil pesos los cuales completó con nueve notebooks que también se llevó en su retirada.
Para los peritos de la investigación y los testigos –en el comercio además del propietario estaban tres clientes – llama la atención cómo el ladrón se dirigió a su objetivo sin mediar preguntas. Tras sustraer su botín, el delincuente se escapó aunque se estima que podría contar con un cómplice afuera del local.
El otro golpe fue a las 20.30 y fue perpetrado por una pareja de ladrones que entraron armados a un taller de compostura de calzado de calle San Lorenzo 1076 y se llevaron 20 mil pesos que un hombre traía consigo y que estaban destinados a comprar el negocio, puesto a la venta.
Según señalaron fuentes de la investigación, uno de los ladrones le pidió a este hombre: “Dame los veinte mil”, conociendo claramente la existencia de ese dinero. Los ladrones habrían esperado que la galería en la que está el local cerrara y que el comprador del negocio entrara con el dinero.
Luego de hacerse de los veinte mil pesos, los delincuentes se retiraron del lugar y aún no han sido encontrados por la policía.
Este lunes a las 19, un hombre ingresó armado a un local de venta de insumos de computación ubicado en 9 de julio 1177. Según destacó el periodista Héctor López en Radio 2, el hombre fue directamente a la caja fuerte de donde sustrajo unos 25 mil pesos los cuales completó con nueve notebooks que también se llevó en su retirada.
Para los peritos de la investigación y los testigos –en el comercio además del propietario estaban tres clientes – llama la atención cómo el ladrón se dirigió a su objetivo sin mediar preguntas. Tras sustraer su botín, el delincuente se escapó aunque se estima que podría contar con un cómplice afuera del local.
El otro golpe fue a las 20.30 y fue perpetrado por una pareja de ladrones que entraron armados a un taller de compostura de calzado de calle San Lorenzo 1076 y se llevaron 20 mil pesos que un hombre traía consigo y que estaban destinados a comprar el negocio, puesto a la venta.
Según señalaron fuentes de la investigación, uno de los ladrones le pidió a este hombre: “Dame los veinte mil”, conociendo claramente la existencia de ese dinero. Los ladrones habrían esperado que la galería en la que está el local cerrara y que el comprador del negocio entrara con el dinero.
Luego de hacerse de los veinte mil pesos, los delincuentes se retiraron del lugar y aún no han sido encontrados por la policía.
