18 DE MAYO
1920: Nacía en la ciudad de Santa Fe, René Alejandro Pontoni.
Uno de los estandartes de Newell’s y del fútbol argentino que paseó su brillantez y jerarquía por los campos de juego de nuestro país en la década de los 40.
Se inició en Gimnasia y Esgrima de Santa Fe hasta que en 1940 es contratado por Newell’s, en donde se encontró con otros exquisitos de la pelota: su coterráneo José Canteli y Mario Morosano, con quienes integró una línea de ataque que marcó época.
Estuvo 4 años en Rosario, dejando una marca de 66 goles y un recuerdo imborrable.
Contratado por San Lorenzo, vivió con el equipo porteño una época de oro, integrando una línea que se decía de memoria: Farro, Pontoni y Martino.
En 1948 sufrió una fractura de rótula, meniscos y rotura de ligamentos en pierna derecha que le cortó la trayectoria.
Tiempo después, volvió a jugar para Independiente Santa Fe de Colombia, desde 1949 a 1952, y en Portuguesa de San Pablo, en Brasil, pero su rendimiento no era el mismo.
En 1954 jugó en San Lorenzo de Almagro nuevamente. Luego se retiró del fútbol profesional para continuar atendiendo la pizzería que poseía en Buenos Aires, con su cuñado, otro grande del fútbol boquense, Mario Boyé.
En la primera división en los clubes de Argentina, jugó 212 partidos, y señaló 132 goles.
Fue campeón de primera división con San Lorenzo de Almagro en 1946. Integró la Selección Nacional, logrando los triunfos de Campeón Sudamericano en 1945, 1946 y 1947.
1920: Nacía en la ciudad de Santa Fe, René Alejandro Pontoni.
Uno de los estandartes de Newell’s y del fútbol argentino que paseó su brillantez y jerarquía por los campos de juego de nuestro país en la década de los 40.
Se inició en Gimnasia y Esgrima de Santa Fe hasta que en 1940 es contratado por Newell’s, en donde se encontró con otros exquisitos de la pelota: su coterráneo José Canteli y Mario Morosano, con quienes integró una línea de ataque que marcó época.
Estuvo 4 años en Rosario, dejando una marca de 66 goles y un recuerdo imborrable.
Contratado por San Lorenzo, vivió con el equipo porteño una época de oro, integrando una línea que se decía de memoria: Farro, Pontoni y Martino.
En 1948 sufrió una fractura de rótula, meniscos y rotura de ligamentos en pierna derecha que le cortó la trayectoria.
Tiempo después, volvió a jugar para Independiente Santa Fe de Colombia, desde 1949 a 1952, y en Portuguesa de San Pablo, en Brasil, pero su rendimiento no era el mismo.
En 1954 jugó en San Lorenzo de Almagro nuevamente. Luego se retiró del fútbol profesional para continuar atendiendo la pizzería que poseía en Buenos Aires, con su cuñado, otro grande del fútbol boquense, Mario Boyé.
En la primera división en los clubes de Argentina, jugó 212 partidos, y señaló 132 goles.
Fue campeón de primera división con San Lorenzo de Almagro en 1946. Integró la Selección Nacional, logrando los triunfos de Campeón Sudamericano en 1945, 1946 y 1947.


