Los jóvenes que denunciaron una serie de agresiones sufrida en la comisaría 11ª recibieron el apoyo y la solidaridad del Concejo en la sesión de este jueves a la tarde, cuando los ediles se pronunciaron en repudio de los apremios ilegales. Aunque el caso todavía está irresuelto, a medida que avanza el análisis de las dos versiones aparece con fuerza la idea de que los chicos que denunciaron haber sufrido golpes y abusos en la comisaría no formaban parte de la patota que agredió a un agente de la policía cuando viajaban en el colectivo de la polémica el domingo pasado a la madrugada. En este sentido, desde la Secretaría de Derechos Humanos de la provincia se volvió a solicitar una investigación por separado de los episodios: por un lado, los supuestos apremios ilegales denunciados por los jóvenes, y por otro la paliza que le propinaron al oficial Ojeda al bajar del coche de la línea 142 en la zona sur de la ciudad. Los padres de los jóvenes que denuncian las agresiones por parte de la policía se reunieron con algunos concejales y con el presidente de la comisión de Derechos Humanos del Concejo Municipal, Carlos Comi, para solicitar respaldo en el reclamo de esclarecimiento de estos episodios. Comi (ARI) y Juan Rivero (Frente Progresista Cívico y Social) "llamaron a los fiscales, jueces y funcionarios provinciales a tomar cartas en el asunto". Basurales Por otro lado, el Concejo también aprobó esta tarde el pedido del justicialista Osvaldo Miatello para que la Municipalidad se ponga a trabajar en la limpieza y erradicación de 103 basurales cuya existencia denunció la semana pasada. La iniciativa contempl también la instalación de contenedores de metal donde hoy se encuentran los basurales mencionados.