"Se busca mujer ama de casa, cama adentro, mensual de entre 45 y 55 años. Tez Blanca, se necesita”, decía el insólito texto de un aviso clasificado que se pudo leer en el fin de semana en un diario de la localidad de Venado Tuerto. El aviso, de alto contenido discriminatorio, no sólo fastidió a los ciudadanos venadenses sino que también fue repudiado por la delegada local del Sindicato de Empleadas Domésticas, María Teresa Ferrari.

Según explicó el abogado Roberto Vázquez Ferreyra en diálogo con Alberto Lotuf en el programa De tarde en tarde, “la discriminación no siempre está mal, tiene que ser arbitraria” y en ese sentido señaló causas graves como las de índole política, social, religión o raza. “O como en la situación que estamos hablando, que se trata de caracteres físicos", agregó.

Lo particular del caso es que si bien “no hay un damnificado directo” que se haya presentado para iniciar una causa por daños y perjuicios ("que haya dicho que la rechazaron por ser morocha", aclaró), la reforma de la Constitución de 1994 habilita a actuar de hecho con medidas como por ejemplo “un amparo para que no siga publicando ese aviso”.

En este sentido, cuando se dio a conocer el aviso Ferrari señaló que “es la primera vez que aparece algo así en nuestra ciudad. No sé quién solicita una empleada doméstica de tez blanca, siendo que en este país se acepta todo tipo razas, religión e ideología”. Y añadió: “No porque alguien sea negra va a trabajar menos o peor que una persona blanca. Este aviso me cayó muy mal porque es discriminatorio para con quienes necesitan trabajar."

Pero aunque el caso no se había dado antes en Venado Tuerto, no es un hecho aislado. Según las cifras que se manejan a nivel nacional en ciertos ámbitos laborales la discriminación en el trabajo es moneda corriente para algunas personas.

De acuerdo a un informe que publica el diario Clarín el INADI, en lo que va del año, ya tiene 250 denuncias. Y en el ministerio, desde abril a la fecha, recibieron unas 400 consultas. Las mejoras en las condiciones laborales y una mayor conciencia en la defensa de sus derechos, dicen los expertos, provoca que la gente se anime a presentar más denuncias al respecto.