En la medida en que los jóvenes introducen en sus hogares nuevos hábitos de relación con la tecnología de comunicación, la “brecha generacional” relacionada con la web comienza a desdibujarse. Diarios online y sitios de Internet, fuertemente vinculados con la actividad personal, constituyen hoy las fuentes de información y entretenimiento principales de los adolescentes.
Los medios tradicionales también son fuente de información y entretenimiento de ese mismo grupo. Según el informe, los jóvenes de clase media se encuentran equipados para construir sus propias combinaciones sobre la base de sus gustos, tienen computadora y televisión en su cuarto, pero los medios ubicados en las “zonas de uso común” en los hogares también son incorporados a sus hábitos de consumo. En el caso de la radio o de los canales de cable que emiten noticias, la iniciativa del encendido no parte de los jóvenes, sin embargo, ambos medios quedan integrados como fuentes de información clave antes de ir al colegio.
El estudio de la UADE, para el que se entrevistaron alumnos que cursan quinto año del colegio secundario con técnica de focus group, da cuenta de que la web forma parte del equipamiento de medios domésticos y el pago de banda ancha se incorporó a los gastos de rutina. Además, muchos de los estudiantes entrevistados admiten tener hasta dos PC conectadas.
Asimismo, en términos generales, los adolescentes se muestran críticos respecto de los medios tradicionales, los cuales son descriptos de manera más distante y eso redunda en nuevas prácticas de consumo. Por ejemplo, escuchar la programación propuesta desde una radio resulta apoco satisfactorio frente a la posibilidad de armar la propia pauta musical en un iPod.


