El mercado del correo electrónico inalámbrico facturará 1.860 millones de euros este año, solamente en Europa, pero esa cifra se triplicará en 2012, según vaticina un estudio de la empresa Froost & Sullivan.
La consultora observa en este mercado un gran potencial porque su uso está pasando del ámbito empresarial al privado.
Sin embargo, la investigación advierte sobre los riesgos de la falta de estandarización tecnológica, porque esta fragmentación puede afectar a la cadena de valor y, en definitiva, al desarrollo del correo electrónico sin cables.
El e-mail móvil es uno de los segmentos más grandes en el mercado de las aplicaciones inalámbricas para empresas. Froost & Sullivan señala que este tipo de servicios serán integrados cada vez por más compañías al mismo tiempo que las que ya lo tienen irán ampliando los servicios que reciben.
El mercado europeo de e-mail inalámbrico generará una facturación por valor de 1.860 millones de euros en 2007, según la consultora, que estima que esa cifra puede alcanzar los 6.650 millones de euros dentro de sólo cinco años, en 2012.
El correo electrónico utilizado en los dispositivos móviles está modificando la forma de hacer negocios. Es que ya no es un elemento de lujo, exclusivo de ciertos ejecutivos, y se ha convertido en masivo y necesario entre los usuarios móviles fueran del ámbito empresarial.
Se pasará, dice el informe, de "está bien tenerlo" a "es obligatorio tenerlo", por lo que es un mercado con perspectivas grandes de crecimiento y las empresas que proporcionan esos servicios deben formular estrategias de movilidad centradas en el e-mail inalámbrico.
Por ahora las empresas son las más aprovechan esta forma de trabajar y comunicarse. Las organizaciones están empezando a comprobar, de primera mano, las grandes posibilidades que les ofrece esta tecnología. Por otro lado, la capacidad de enviar y recibir datos entre los dispositivos móviles y servidores secundarios crea una nuevas áreas de aplicación para esta tecnología.
"Los casos prácticos justifican los beneficios de la conectividad móvil, que es conocida y apreciada", afirma Shomik Banerjee, analista de Froost & Sullivan, en un comunicado.
"La conectividad móvil no sólo mejora la flexibilidad sino que además permite una mayor rapidez a la hora de tomar decisiones e incrementa la efectividad gracias a que se pueden usar tiempos muertos para trabajar", agregó.


