Kevin Federline no era nadie, pero entonces conoció a Britney Spears. La historia es conocida: se conocieron, se enamoraron, se casaron, tuvieron un hijo, después otro, entonces se pelearon y finalmente comenzaron los trámites de divorcio.

Pero ahora el rapero podría ser algo más que ex de la princesa pop. Es que lo invitaron a protagonizar su propio reality show en un canal de cable de los Estados Unidos. Sí, Kevin fue invitado para protagonizar un programa sobre su vida cotidiana, sus presentaciones como cantante y su asistencia a fiestas y casas nocturnas. Parece que a la gente le importa lo que el hombre hace.

El tema es que, aunque le guste mucho la idea, tanto económica como artísticamente, el acuerdo pre-matrimonial que firmó con su ex mujer le impide participar en alguno de esos programas mientras su divorcio no es concretado, por lo que debería llegar a un acuerdo al respecto con los abogados de Britney.

“Pusieron a Kevin en una situación muy difícil. Él se entusiasmó con la propuesta, pero no quiere dar un paso atrás en las exigencias de su proceso de divorcio. Él difícilmente negociará”, dijo un amigo del aspirante a cantante.