No cambió de opinión. La actual diputada nacional Graciela Ocaña mantiene su opinión al respecto del líder sindical, aquel que impulsó su renuncia al Ministerio de Salud de la Nación en el marco de la denominada “mafia de los medicamentos”. “Un ladrón es un ladrón”, lanzó a pesar del alejamiento del camionero del kirchnerismo.
En diálogo con el programa A Diario (Radio 2), la ex ministra de Salud nacional entre 2007 y 2009, consideró en relación a Hugo Moyano y su distancia y oposición al gobierno: “Para mí sigue siendo el mismo dirigente que aprovecha su rol para enriquecerse” y remarcó: “Cuando era muy chica mi abuelo me enseñó a ser directa y un ladrón es un ladrón por mucho que sea de la oposición o del oficialismo”.
Ocaña, quien fue responsable del Pami entre 2004 y 2007, opinó en torno a la disolución de la Administración de Programas Especiales (APE) que manejaba un millonario caudal de fondos por los reintegros que debía girar a las obras sociales por prácticas médicas complejas.
“El gobierno suele hacer esto, elimina un organismo y crea otro en el que pasa lo mismo pero no se discute cómo se va a cambiar la distribución de esos recursos”, planteó.
Según indicó, hay que revisar los fondos de las obras sociales, “sobre todo las que son para atender enfermedades muy costosas que requieren atención especial”, sugirió. “Lo que han hecho es sincerar una situación que pasa hace 45 días, hay causas judiciales en el medio”, recordó.
La legisladora dejó abierta la posibilidad de nuevos conflictos: “Si ponen a una persona con línea directa a la presidenta y se le paga a quien está con ellos y no se les paga a los que no están con ellos, en el medio quedan las personas. No debería ocurrir”, manifestó.
Graciela Ocaña (Radio 2)