La alfombra verde que dejó la tormenta sobre la ciudad comenzó a despejarse el mismo miércoles a la noche. Camiones especiales, maquinaria pequeña y trabajadores de distintas dependencias pusieron manos a la obra. Pero como ese miércoles fue el Día del personal de la recolección y no hubo servicio, la basura acumulada fue mucha. Desde este jueves entonces los trabajos se intensificaron y se realizaron tareas conjuntas con personal de las empresas privadas, la Municipalidad, la Empresa Provincial de la Energía (EPE) y de Aguas Santafesinas (Assa).

Todo esto a pesar de que los piquetes demoraron los trabajos. "Este viernes 16 camiones cargados con basura no pudieron pasar hacia la zona oeste", precisó Marcos Escajadillo, titular de Defensa Civil, a Rosario3.com. Ese operativo especial, que dejó un saldo positivo según los responsables del mismo, continuará este fin de semana.

Pero todavía falta mucho (ver fotos de este viernes a la tarde). Por eso, en la reunión de coordinación de las áreas operativas que se llevó adelante este mediodía, la Municipalidad informó las 48 horas posteriores a la tormenta la evaluación acerca de la atención en la emergencia fue positiva en relación a la magnitud de los daños ocasionados (más aún si se tiene en cuenta que las propias empresas sufrieron serios inconvenientes).

En ese sentido, la Dirección de Política Ambiental determinó que los camiones recolectores prioricen el levantamiento de los residuos domiciliarios, a fin de evitar la descomposición de los mismos en la vía pública. Asimismo, se encuentran trabajando cuadrillas con palas y camiones abiertos que levantan las hojas embolsadas y a granel amontonadas en montículos por los vecinos y los barrenderos, según informó el área de prensa de la Municipalidad.

Las recolecciones se están realizando a un ritmo más lento que el habitual por la magnitud del volumen a trasladar y demandará varios días más recomponer la situación de normalidad.

Para tener una dimensión de la situación, en una situación normal se concretan un promedio de treinta viajes por noche, y a primera hora de este viernes ya se habían realizado 60 viajes y sólo se habían cubierto poco más de la mitad de los recorridos estipulados.
 
La situación se vio agravada porque el miércoles 15 no hubo servicio de recolección, por haberse celebrado el día del trabajador del sector. Por esa razón, en el día de ayer se habían acumulado residuos de dos días incrementados por el enorme volumen de hojas, ramas, vidrios y otros residuos generados por la propia tormenta.

Si barrés, juntalo

La solidaridad entre la gente fue mucha. Entre las historias dramáticas se multiplicaron también los testimonios de quienes fueron ayudados por desconocidos. Y ahora, es la propia Municipalidad quien pide a la población una mano: desde la Dirección de Política Ambiental se recomienda a los vecinos que al barrer las veredas de sus domicilios no arrojen las hojas de los árboles a la calle porque, en caso de reanudarse la lluvia, terminarán tapando los sumideros y las bocas de tormenta. En cambio se solicita a quienes solidariamente se esfuercen por barrer, que  completen la tarea embolsando los residuos verdes, y en caso de ser muy grande el volumen establecer montículos en la vereda para que los servicios de refuerzo los recojan.