La última fecha del Clausura 2003 será recordada por siempre por los hinchas de Central por aquel inolvidable 7 a 2 a Boca, conseguido de la mano de la espectacular dupla de delanteros conformada por César Delgado y Luciano Figueroa, éste último autor de la hazañosa marca de cinco tantos en ese juego.

Si bien Boca era un equipo “muletto”, porque los titulares estaban festejando la obtención de la Copa Libertadores, Lucho se despidió de sus hinchas a lo grande para probar suerte en el fútbol europeo, luego de un campeonato brillante que lo tuvo como máximo artillero.

Para obtener ese logro, a Figueroa seguramente lo ayudaron también los tres goles que le marcó a Gimnasia de La Plata, el 2 de marzo de ese año cuando el certamen recién comenzaba: por la tercera fecha, los canallas visitaron al Lobo, y Lucho se despachó con tres conquistas que, junto a la inicial de César Delgado, le dieron forma a un contundente 4 a 0.

Ese es el partido al que pertenecen las imágenes que acompañan éste artículo. El primer gol del cotejo lo marcó “Chelito" a los 5 minutos del primer tiempo, como una premonición de los que se precipitarían en la etapa siguiente. En el complemento, la blanca sonrisa de Figueroa aparecería tres veces: a los 16 minutos primero, a los 31 después, y ya a instantes del epílogo, para rubricar un categórico marcador favorable a los de Arroyito.

Figueroa quedó al fin del torneo con 17 tantos, 2 más que Roberto Nanni de Vélez, y la Academia rosarina acabó cuarta en la tabla de posiciones con 37 puntos, a 6 del River campeón.