Una mujer denunció que su nieta, con la cual convive, llevó a la casa un perro rottweiler que mató a su mascota, un perro caniche. El animal habría atacado también a personas. La víctima pidió que lo saquen de su casa.
En diálogo con Radiópolis (Radio 2) Patricia, una jubilada que vive en Virasoro e Iriondo, denunció que su perrito caniche fue atacado en varias oportunidades por un rottweiler, un animal que fue llevado a la casa por su nieta Natalia con quien convive. Finalmente, la semana pasada terminó con su vida tras una feroz mordida.
“Vivo con mi nieta y su novio. Quiero que saquen el perro”, dijo llorando. La desesperación es entendible. Según expresó, la joven pareja trajo a vivir a la casa al perro que resultó ser muy agresivo. Su blanco predilecto fue el canichito de Angélica. “Lo mordió varias veces, lo agarraba como a un peluche”, señaló. Al parecer, tras varios intentos, la semana pasada lo mató. “Lo sacaron a la calle sin bozal y agarró al mío. Terminó en una clínica para mascotas en terapia intensiva pero se murió”, agregó.
Sin embargo, el rottweiler no sólo habría sido agresivo con otros animales. También lo fue con las personas: “A mi ex nuera le abrió la cabeza y le tuvieron que dar 18 puntos. A mí, la Navidad pasada me mordió la boca y me tuvieron que dar 4 puntos en los labios”, continuó la jubilada.
“Ya hice denuncias, hablé al Imusa. Quiero al perro afuera de mi casa”, remarcó y reveló que intentó varias veces convencer a la nieta y a su pareja de retirar al animal sin suerte.
En diálogo con Radiópolis (Radio 2) Patricia, una jubilada que vive en Virasoro e Iriondo, denunció que su perrito caniche fue atacado en varias oportunidades por un rottweiler, un animal que fue llevado a la casa por su nieta Natalia con quien convive. Finalmente, la semana pasada terminó con su vida tras una feroz mordida.
“Vivo con mi nieta y su novio. Quiero que saquen el perro”, dijo llorando. La desesperación es entendible. Según expresó, la joven pareja trajo a vivir a la casa al perro que resultó ser muy agresivo. Su blanco predilecto fue el canichito de Angélica. “Lo mordió varias veces, lo agarraba como a un peluche”, señaló. Al parecer, tras varios intentos, la semana pasada lo mató. “Lo sacaron a la calle sin bozal y agarró al mío. Terminó en una clínica para mascotas en terapia intensiva pero se murió”, agregó.
Sin embargo, el rottweiler no sólo habría sido agresivo con otros animales. También lo fue con las personas: “A mi ex nuera le abrió la cabeza y le tuvieron que dar 18 puntos. A mí, la Navidad pasada me mordió la boca y me tuvieron que dar 4 puntos en los labios”, continuó la jubilada.
“Ya hice denuncias, hablé al Imusa. Quiero al perro afuera de mi casa”, remarcó y reveló que intentó varias veces convencer a la nieta y a su pareja de retirar al animal sin suerte.
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Patricia (Radio 2)
