Al menos 15 personas murieron en un ataque suicida perpetrado en la puerta de la base aérea estadounidense de Bagram, en Afganistán, en la que el vicepresidente de Estados Unidos, Dick Cheney, realizaba una visita. El ataque tuvo lugar a las 10.00 hora local y Cheney resultó ileso del atentado. Las fuentes gubernamentales afganas no precisaron cuántos soldados y civiles había entre los fallecidos.

En tanto, un supuesto portavoz talibán, Qari Mohammad Yousef, reivindicó el atentado y aseguró a la agencia EFE que había más de 20 muertos y 30 heridos en el ataque, la mayoría de ellos soldados estadounidenses. Por su parte, la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (Isaf) aseguró en un comunicado que el ataque suicida fue lanzado desde un vehículo en la puerta de entrada de la base, y causó la muerte de cuatro personas y heridas a otras 23, que reciben ya atención médica en las instalaciones militares.

"De nuevo, los extremistas han recurrido a inmorales actos de violencia contra afganos inocentes y las fuerzas internacionales que están aquí para protegerles", dijo el portavoz de la Isaf, el coronel Tom Collins.

Procedente de Pakistán, Cheney había aterrizado anoche en Bagram, una base situada al norte de Kabul, debido a las malas condiciones atmosféricas que le impidieron hacerlo en el aeropuerto de la capital. Por la mañana, Cheney mantuvo un encuentro con tropas estadounidenses, y está previsto que vuele esta tarde a Kabul para reunirse con el presidente de Afganistán, Hamid Karzai, según una fuente de la oficina presidencial afgana que pidió el anonimato.

Tras el duro invierno afgano, los talibanes han intensificado su actividad en Afganistán, donde se han producido 400 muertes, la mayoría insurgentes, debido al conflicto en lo que va de año.