El anuncio de la visita a Rosario del presidente Néstor Kirchner modificó el clima habitual de la zona oeste de la ciudad. Desde que se confirmó la presencia del primer mandatario para el miércoles a partir de las 10, la tranquilidad del barrio se quebró.

Es que un despliegue de personal municipal, efectivos de la policía provincial y miembros del gobierno nacional desfilaron por el barrio –donde está prevista la inauguración de 200 viviendas correspondientes al Plan Habitat– para ultimar los detalles de la seguridad presidencial.

La conmoción por la llegada de Kirchner también tuvo su rebote al interior de la iglesia evangélica Santuario de Fe, de avenida Provincias Unidas 2050, donde se realizará el acto.

Por su parte, el pastor Norberto Carlini se mostró contento por la posibilidad de tener en el templo la visita del presidente de la Nación. “La verdad es que no lo esperábamos, tampoco pretendemos convertirlo al evangelio, pero entendemos que se necesitan más autoridades cristianas en el gobierno”, expresó Carlini.