El horror llegó a Kenya; allí al menos quince personas murieorn carbonizadas en un templo, en medio de un clima de absoluta violencia que se intaló con motivo a las elecciones llevadas a cabo el jueves de la semana pasada.
Según señalan medios internacionales, una multitud de militantes incendió una iglesia en la que se había refugiado un grupo rival. El trágico resultado: al menos 15 muertos, que podrían ser muchos más.
"Hubo una turba enorme que atacó a la Iglesia", relató a la agencia AP un testigo en Eldoret, situada a 300 kilómetros de la capital del país, Nairobi. La misma fuente indicó que había entre 15 y 20 muertos por el ataque, aunque otras personas ya hablaban de más de 30. El elevado el número de los que sufrieron quemaduras gravísimas fue derivado a un hospital.
Eldoret es una de las ciudades de Kenya más afectadas por la ola de violencia, luego de las elecciones presidenciales del 27 de diciembre. El jefe de la oposición, Raila Odinga, que luego de los comicios había proclamado su triunfo y denunciado fraude, afirmó que son más de 250 los muertos en acciones de violencia. "Primero nos robaron las elecciones, ahora disparan contra nosotros", sostuvo.


