El paro en las estaciones de servicio de la provincia se cumplía en un ciento por ciento en Rosario, donde desde la hora cero de este viernes, y luego de larguísimas colas de vehículos que buscaban cargar combustible antes de que se colgaran las mangueras, no había atención al público.
Si bien la medida de fuerza nacional es por 48 horas, este viernes a la tarde sindicalistas y empresarios se reunirán en Buenos Aires para intentar destrabar la situación.
Sin embargo, la postura de Rosario es más dura que la de las otras seccionales y de hecho Ismael Marcón, titular del gremio en la ciudad, dijo que la medida de fuerza se cumplirá en su totalidad aunque se llegue a un acuerdo a nivl nacional.
A las 12 de la noche empezaron incluso los piquetes del gremio en distintas estaciones de servicio –a la 1 había unos 20 pibes en la gasolinera de Mitre y Urquiza y se dirigían a la Avellaneda y Córdoba– para garantizar que nadie se atreviera a romper la huelga.
Una de las claves de esa postura es que los empleados se sienten “estafados” por los empresarios luego de que el 23 de noviembre firmaran un acuerdo de aumento salarial del 19 por ciento que luego no se concretó.
La fecha elegida para el paro no podía generar más complicaciones para los usuarios. Naturalmente dos días sin estaciones de servicio se hacen sentir, pero más cuando muchos viajan para pasar las fiestas de fin de año en algún otro lugar o directamente iniciar las vacaciones.
