El tribunal oral de Concepción del Uruguay condenó este martes a un año y seis meses de prisión en suspenso a los responsables de la fumigación de una escuela rural en la localidad entrerriana de Colonia Santa Anita, un fallo inédito en el país y que según especialistas sienta "un precedente" sobre la protección de las instituciones educativas linderas a plantaciones. 

Los jueces Fabián López Moras, Mariano Martínez y Mariela Rojas de Di Pretoro condenaron por "lesiones leves culposas y contaminación ambiental culposa" al presidente de una empresa fumigadora, al dueño de un campo que pidió el servicio y al piloto del avión que hizo el trabajo, en el primer juicio con sentencia vinculado a la problemática de las escuelas fumigadas en Argentina. 

La causa, que había sido elevada a juicio el 4 de julio último, se inició por la denuncia de la maestra Mariela Leiva, quien al igual que un grupo de alumnos de la escuela Colonia Santa Anita vio afectada su salud por contaminación de los pesticidas, y quién aseguró hoy a Télam que la decisión del tribunal "sentó un precedente".

"Sabíamos que la sentencia iba a ser de esta manera porque era lo que había pedido la fiscalía. Valoramos la decisión del tribunal que sentó un precedente. Sabíamos que no íbamos a lograr una condena efectiva. Es muy fuerte lo que estamos viviendo", dijo Leiva al término de la lectura del veredicto.

Leiva detalló que en la zona en la que ella es docente, hay al menos 14 escuelas rurales de las cuales sólo una no es lindera a un campo sembrado, por lo que el resto "ha estado expuesta a fumigaciones", y sólo en tres se han presentado denuncias penales.

Según el último relevamiento realizado por el sindicato docente de Entre Ríos (Asociación Gremial del Magisterio, Agmer) y la Asamblea Ciudadana Ambiental de Concepción del Uruguay, al menos el 70 por ciento de las escuelas rurales fue fumigada en tres departamentos estudiados en Entre Ríos. 

En Uruguay, Nogoyá y Gualeguaychú, sobre 74 escuelas censadas, en 52 se confirmaron casos de afecciones en la piel y vías respiratorias de chicos y maestros, vómitos y problemas gastrointestinales por agrotóxicos. 

En este nuevo fallo emitido hoy se condenó al presidente de Villaguay Aero Litoral S.A, Erminio Bernardo Rodríguez; al dueño del campo de arroz y maíz, José Mario Honecker, y al piloto César Martín Visconti, sobre quién recayó además una inhabilitación de un año para ejercer esa labor.

El fiscal coordinador Fernando Lombardi dijo hoy que la decisión "no era contra la actividad agropecuaria" y estimó que "será un caso testigo para futuros sucesos similares", aunque evaluó que se trataba de un delito "involuntario", ya que "no se cometió con intencionalidad por lo que no existe el dolo, pero sí por negligencia al no extremarse las medidas de seguridad, por lo que se está ante un delito culposo".

Desde las organizaciones que buscan proteger a los estudiantes en las escuelas rurales y prohibir las fumigaciones masivas, este fallo es "emblemático".

"Este fallo es emblemático porque es el primero que se consigue en el ámbito de las escuelas rurales, que son un aspecto del problema de las fumigaciones y del modelo productivo sojero", aseguró Darío Ávila, abogado de las Madres de Ituzaingó, organización que logró en 2012 llevar a juicio por primera vez a productores rurales por fumigar, quienes fueron condenados a tres años de prisión en un fallo avalado recientemente por la Corte Suprema de Justicia de la Nación.

"La importancia de estos juicios que es que van sentando jurisprudencia y ponen al modelo productivo en discusión en el ámbito de la justicia y de las responsabilidades penales", aseguró el letrado, quién valoró que "Mariela y toda la comunidad supieron registrar lo que estaba pasando, pudieron reunir la prueba y tuvieron la valentía de presentar la denuncia penal".

Mientras tanto, en Entre Ríos se volvió a plantear la creación de una nueva normativa, que reemplace a la Ley 6.999 de Agroquímicos que estipula 50 metros de distancia entre los campos fumigados y las escuelas pero no se cumple, reconocieron desde las organizaciones.