El juez de Ejecución Penal del sur de la provincia, Efraín Lurá, justificó el permiso de salidas transitorias al muchacho que –prófugo luego de la tercera– mató el domingo pasado al churrero Daniel Acosta en Gutenberg y La Paz. "El permiso transitorio se dio con todos los recaudos legales", dijo a Radio 2 Lurá, quien sin embargo opinó que se debería restringir este beneficio a los reincidentes –el asesino era uno–.

Según el juez, cuando pidió el permiso de salidas transitorias el entonces detenido en la comisaría 13ª cumplía todos los "requisitos legales": más de la mitad de la condena purgada, un informe psiquiátrico que lo tildaba de no peligroso ni agresivo y un informe policial que sostenía que su conducta y concepto en el penal eran buenos. Además, como la pena terminaba en abril próximo no se consideraba probable una fuga. Sin embargo, se profugó tras su tercera salida de 12 horas.

No, no era el único prófugo. Según el cálculo de Lufrá, en Rosario hay unas cuatro mil personas en esa situación.