La prueba nuclear realizada por Corea del Norte la semana pasada provoc. "un potencial de inestabilidad" en Asia que antes no existía, afirmó la secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice.

Rice llegó este miércoles a Japón para examinar con el ministro de Exteriores, Taro Aso, la mejor forma de aplicar las sanciones impuestas a Corea del Norte por el Consejo de Seguridad de la ONU.

Según la agencia Kyodo, Rice indicó a los reporteros que viajan con ella en esta gira asiática (que la llevará también a Seúl y Pekín) que es "extremadamente importante reafirmar, y reafirmar con fuerza, los compromisos defensivos de EE.UU. con Japón y Corea del Sur", sus aliados en la región del nordeste de Asia.

Medios de prensa occidentales indicaron que Rice urgirá a Seúl y Tokio la creación de un sistema de detección de radiación y otros tipos de inspecciones a fin de impedir que Corea del Norte pueda importar y exportar materiales nucleares.

Una de las mayores preocupaciones de EE.UU. por la prueba nuclear, que el pasado 9 de octubre demostró que Corea del Norte posee armas de ese tipo, es que el régimen comunista pueda vender esa tecnología atómica a grupos terroristas y países enfrentados a Washington.

Rice dejará mañana Japón con destino a Corea del Sur, donde tiene previsto celebrar una reunión trilateral con el ministro de Exteriores nipón y el titular surcoreano de ese departamento, Ban Ki-moon.

Después viajará a Pekín, la parte más difícil de su gira asiática dados los fuertes lazos que China mantiene aún con Corea del Norte.

China, Corea del Sur y Japón, junto a Estados Unidos y Rusia, son los interlocutores de Corea del Norte en las conversaciones a seis bandas sobre el programa nuclear norcoreano, interrumpidas en noviembre del año pasado debido al boicot de Pyongyang.

La llegada de Rice al nordeste de Asia coincide con los nuevos rumores sobre los preparativos de Corea del Norte para realizar otras pruebas nucleares en breve.

Según la cadena de televisión norteamericana NBC, que cita a fuentes oficiales de EE.UU., el alto mando militar norcoreano informó a Pekín de que pretende efectuar "una serie de pruebas nucleares subterráneas", tras las realizadas el pasado día 9.

Otra cadena de televisión norteamericana, la CNN, que citó a fuentes de los servicios de inteligencia de Estados Unidos, reveló que existe información sobre declaraciones de altos miembros de la jerarquía norcoreana que subrayan la intención de Pyongyang de realizar "múltiples pruebas" nucleares.

Según la CNN, los satélites espía de Estados Unidos han detectado movimientos en Corea del Norte que podrían ser preparativos de nuevos ensayos atómicos.

El portavoz de la Casa Blanca, Tony Snow, reconoció que Corea del Norte podría llevar a cabo nuevos test nucleares como un acto de provocación para reforzar su postura, dado que la primera prueba fue de muy baja potencia.

Snow advirtió a Corea del Norte de que se arriesga a quedar "más aislada si cabe" y destacó que, por el contrario, China y EE.UU. "se convertirán en socios estratégicos para garantizar la seguridad en la península coreana".

El Gobierno estadounidense mantiene que hay que reaccionar con firmeza ante cualquier acto de provocación del régimen norcoreano, un mensaje que Rice se encargará de trasladar en la gira que hoy comenzó en Asia.