Los 15 miembros del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas se reunieron este domingo a puerta cerrada para debatir un proyecto de resolución acordado por Estados Unidos y Francia para buscar una salida al conflicto en Líbano, cuyo gobierno, sin embargo, ya manifestó reparos al documento.

 

El proyecto insta a un "cese completo de las hostilidades" entre Isarel y la milicia libanesa Hezbolá.

 

Particularmente se pide a Hezbolá que ponga fin a todos los ataques y a Israel que detenga todas sus "operaciones ofensivas militares" por tierra, mar y aire.

 

Asimismo, se exhorta a las partes a que se comprometan a "trabajar en un alto el fuego permanente y una solución a largo plazo" en base a una serie de principios y elementos políticos.

 

En el marco político se destaca la creación de una zona de seguridad, el despliegue de una fuerza internacional, con mandato de la ONU, la demarcación de las fronteras del Líbano, incluidas las controvertidas Granjas de Cheba, y la exigencia de que el gobierno de Beirut ejerza su autoridad y soberanía en todo el territorio libanés y desarme a las milicias.

 

Asimismo, se hace un llamamiento a la comunidad internacional a que tome las medidas necesarias para asistir en el aspecto financiero y humanitario a la población del Líbano, en lo que se refiere al retorno de los 700 mil libaneses desplazados de sus casas, y a la reapertura del aeropuerto y de los puertos libaneses.

 

El embajador francés, Jean Marc de la Sabliere, señaló que, en general, el documento fue recibido "positivamente" por parte de los miembros del Consejo, pero que ahora los países deben consultar con sus capitales.

 

El representante del Líbano, Nouhad Mammoud, expresó su decepción porque la resolución no refleja las preocupaciones de su país, que fueron expresadas en un marco de acción político que presentó la semana pasada en el Consejo de Seguridad.

 

La objeción principal, según dijo, es que en el documento no se pide la retirada de las tropas de Israel, que tiene ya 10 mil efectivos desplegados en el sur del Líbano y ha dicho que no los evacuará hasta que no llegue una fuerza multinacional.

 

Fuente: EFE