Pese a que los ministros de Economía y Educación, Ángel Sciara y Claudia Balagué, fueron contudentes a la hora de plantear la imposibilidad de reabirir la paritaria salarial, los estatales y docentes no cejan en su lucha por un sueldo digno. El secretario general de Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), Gustavo Martínez, advirtió que no descartan tomar medidas de fuerza en conjunto con otros gremios en un triple reclamo a la Nación, la provincia y los municipios. Quieren que se actualicen los salarios, se elimine el impuesto a las ganancias y se eleven las asignaciones familiares. Este jueves los trabajadores del Estado se reunirán en plenario para definir pasos a seguir.
Consultado por Rosario3.com, Martínez destacó la necesidad de delinear un plan de lucha provincial que involucre a Amsafé y a UPCN, aunque advirtió que si no se consigue una unión de criterios a nivel Santa Fe, comenzarán con medidas locales.
“Según los cálculos más modestos la canasta básica está entre 7.600 y 8.000 pesos, y la mitad de los 160 mil trabajadores del Estado cobran apenas 5.000 pesos”, criticó Martínez para quien el precio de la canasta no debe superar el sueldo que percibe un empleado.
Asimismo, sostuvo que las asignaciones familiares en Santa Fe son demasiado bajas en comparación a las nacionales: 112 pesos, frente a 460. Sin embargo, apuntó que aún esta última cifra es insuficiente y solicitó se actualice hasta llegar por lo menos a los 550 pesos.
Por otro lado, reclamó el pase a planta de los trabajadores en negro quienes –según estimaciones del gremio– superan las 64 mil personas: 60 mil contratados por nación y alrededor de 4 mil por la provincia. “A nivel comunal y municipal las cifras son peores”, advirtió.
“El gobernador y los intendentes tienen con nosotros una deuda ética, política, económica e histórica”, concluyó.