Vecinos de zona sur asistieron este lunes a la reunión de la Comisión de Planeamiento del Concejo Municipal y expresaron su oposición a la iniciativa del oficialismo de construir 1.200 viviendas en el terreno del ex Batallón 121. Tras un cuarto intermedio, volverán a reunirse este miércoles, un día antes de la sesión en la que se aprobaría la ordenanza.
La presión de los vecinos –que piden que el espacio sea utilizado para un jardín botánico con un centro cultural y ambiental– se hizo sentir y no se consiguió el despacho de comisión en Planeamiento, por lo cual, tras un cuarto intermedio, este miércoles volverán a reunirse.
Los habitantes de la zona proponen una iniciativa similar a la que existe en las grandes ciudades del mundo, pero el proyecto del oficialismo –que incluye una fuerte inversión privada– ya contaría con el aval de los restantes bloques y sería aprobado en la sesión de este jueves.
En su presentación, los vecinos remarcaron que “Rosario es una de las pocas ciudades grandes del país que no cuenta con un jardín botánico”, por eso insistieron en la viabilidad de la propuesta a la que calificaron como “fundamental para que los chicos tomen conciencia de las cuestiones ambientales y que los grandes lo disfruten”.
Además, apuntaron a la iniciativa privada que se emplazaría en el predio y la describieron como “un negocio inmobiliario a partir del cual la empresa, como parte de ese negocio, entregaría un parque intrascendente que no le serviría a nadie. El resto de los edificios de valor patrimonial histórico va a ser entregado para el desarrollo de actividades industriales. Eso nos parece un verdadero desatino”, remarcó Flavio Patrici, de la Agrupación Vecinos Verde 11, a Rosario3.com.
La oposición de Giuliano
El concejal justicialista Diego Giuliano, se mostró favorable a lo propuesto por los vecinos y señaló que “el oficialismo quiere construir 1200 viviendas privadas en lo que debe ser un parque público”.
“Si la Provincia o el Municipio funcionan como una inmobiliaria del mercado, van a comprometer el patrimonio verde de la ciudad y eso es irrecuperable”, afirmó el edil y argumentó que “agregar densidad y metros cuadrados de cemento en un espacio que debería ser destinado a un gran parque público, es transformar el pulmón más importante de la zona sur, en el patio trasero de un negocio inmobiliario”.
Para el presidente del bloque Encuentro por Rosario, “la construcción de viviendas es una prioridad básica, pero hacerlas en el predio del batallón es como hacerlas en el parque Urquiza o en el parque Independencia.
“El ex Batallón fue comprado por el Estado Provincial en 2007 y los santafesinos pagamos 22 millones de pesos por ese espacio. La zona sur es la de menor relación espacio verde–cantidad de habitantes. Por eso, el predio es insustituible e irrecuperable y debe ser un área ecológicamente protegida , transformándose en el “Parque Público de la Democracia”, sostuvo Giuliano.
“Reutilizar las construcciones patrimoniales allí existentes o instalar el polo tecnológico, reciclando los edificios que puedan acondicionarse es positivo, pero cargar al predio con 1200 viviendas en monoblock es desperdiciar la oportunidad de un nuevo parque de dimensiones extraordinarias”, aseguró el edil.
La presión de los vecinos –que piden que el espacio sea utilizado para un jardín botánico con un centro cultural y ambiental– se hizo sentir y no se consiguió el despacho de comisión en Planeamiento, por lo cual, tras un cuarto intermedio, este miércoles volverán a reunirse.
Los habitantes de la zona proponen una iniciativa similar a la que existe en las grandes ciudades del mundo, pero el proyecto del oficialismo –que incluye una fuerte inversión privada– ya contaría con el aval de los restantes bloques y sería aprobado en la sesión de este jueves.
En su presentación, los vecinos remarcaron que “Rosario es una de las pocas ciudades grandes del país que no cuenta con un jardín botánico”, por eso insistieron en la viabilidad de la propuesta a la que calificaron como “fundamental para que los chicos tomen conciencia de las cuestiones ambientales y que los grandes lo disfruten”.
Además, apuntaron a la iniciativa privada que se emplazaría en el predio y la describieron como “un negocio inmobiliario a partir del cual la empresa, como parte de ese negocio, entregaría un parque intrascendente que no le serviría a nadie. El resto de los edificios de valor patrimonial histórico va a ser entregado para el desarrollo de actividades industriales. Eso nos parece un verdadero desatino”, remarcó Flavio Patrici, de la Agrupación Vecinos Verde 11, a Rosario3.com.
La oposición de Giuliano
El concejal justicialista Diego Giuliano, se mostró favorable a lo propuesto por los vecinos y señaló que “el oficialismo quiere construir 1200 viviendas privadas en lo que debe ser un parque público”.
“Si la Provincia o el Municipio funcionan como una inmobiliaria del mercado, van a comprometer el patrimonio verde de la ciudad y eso es irrecuperable”, afirmó el edil y argumentó que “agregar densidad y metros cuadrados de cemento en un espacio que debería ser destinado a un gran parque público, es transformar el pulmón más importante de la zona sur, en el patio trasero de un negocio inmobiliario”.
Para el presidente del bloque Encuentro por Rosario, “la construcción de viviendas es una prioridad básica, pero hacerlas en el predio del batallón es como hacerlas en el parque Urquiza o en el parque Independencia.
“El ex Batallón fue comprado por el Estado Provincial en 2007 y los santafesinos pagamos 22 millones de pesos por ese espacio. La zona sur es la de menor relación espacio verde–cantidad de habitantes. Por eso, el predio es insustituible e irrecuperable y debe ser un área ecológicamente protegida , transformándose en el “Parque Público de la Democracia”, sostuvo Giuliano.
“Reutilizar las construcciones patrimoniales allí existentes o instalar el polo tecnológico, reciclando los edificios que puedan acondicionarse es positivo, pero cargar al predio con 1200 viviendas en monoblock es desperdiciar la oportunidad de un nuevo parque de dimensiones extraordinarias”, aseguró el edil.