Un abogado que fue representante de la familia del estudiante secuestrado en 2003, Cristian Schearer, fue asesinado por un cliente al que defendía en causas por abuso sexual, quien lo sorprendió y le disparó en el interior del bar donde tomaba un café, en el centro de la capital provincial, tras lo cual se suicidó, informaron fuentes judiciales y policiales.

Se trata del letrado Ernesto González, quien fue asesinado cerca de las 7.15, cuando se encontraba en el café “Martha de Bianchetti”, situado en la esquina de calles 9 de Julio y Mendoza, del microcentro correntino.

Fuentes judiciales identificaron al agresor como Carlos Martínez, a quien González patrocinaba en una causa por abuso sexual presuntamente cometido contra dos sobrinas y en la que se hallaba prófugo.

A raíz del ataque dentro de la confitería, también resultó herido de un tiro en un glúteo otro abogado, identificado como Claudio Dimitroff, quien se hallaba en otra mesa y se encontraba fuera de peligro, añadieron las fuentes.

El episodio se produjo cuando González entró a desayunar sin advertir que Martínez estaba sentado en otra mesa del salón. Según los testigos, el homicida disparó seis veces contra el abogado y luego se suicidó de un tiro en la cabeza.

Juan Carlos Demonte, cliente de la cafetería, declaró: "Escuchamos los tiros y pensamos que era un desequilibrado que nos iba a matar a todos" y aclaró que "no hubo ningún tipo de agravios previos, se escucharon solamente los tiros".

Los detalles de la investigación fueron informados en una conferencia de prensa por los fiscales Sonia Meza, a cargo de la instrucción de la causa, y Graciela Fernández Contarde, Buenaventura Duarte y Gustavo Robineau, quienes integran la Unidad Fiscal de Investigaciones de Corrientes.

Los funcionarios precisaron que el homicida "actuó solo" y que "hay filmaciones" que brindó la empresa a los investigadores y que además se secuestró una pistola calibre 9 milímetros Bersa, empleada por el atacante.

En la causa declararon el socio del abogado asesinado, Rubén Leiva, y el guardia de seguridad del café céntrico donde ocurrieron los hechos, mientras que está previsto que los hagan otras diez personas, entre clientes y empleados del bar, dijo a Télam la fiscal Meza.

La fiscal realizó además un relato del suceso: "El doctor González ingresaba al local, no lo vio a su agresor que estaba desde antes y se encontraba en una mesa de la esquina del local. Al verlo ingresar a González en momentos en que se disponía a sentarse y mientras acomodaba sus cosas en la mesa, como un portafolio, fue abordado por su agresor, quien le dispara seis veces”.

“Los disparos fueron de sorpresa y desde atrás”, reveló la fiscal, al aludir a la autopsia que reveló que González recibió seis tiros: uno en la columna cervical, tres en el tórax, uno en la fosa lumbar derecha y otro en el macizo frontal, que ingresó por el tabique nasal derecho y salió por la región geniana izquierda.

“La muerte fue en el acto”, resumió Meza, quien añadió que “luego del hecho Martínez se disparó en la sien", ya que presenta "un orificio de entrada en el lado izquierdo de la región temporal y de salida en el lado derecho”.

El atacante estaba acusado de abuso sexual y, en una de las causas, era representado por Martínez: “La relación era de cliente-abogado defensor, con Martínez como imputado”, añadió la fiscal, al referirse a una causa por abuso que se tramita en la Fiscalía de Instrucción 6, a cargo de Gustavo Robineau, y el juzgado de Instrucción 3, dirigido por la jueza Josefina González Cabañas.

En ese caso, “Martínez estaba prófugo, pesaba sobre él una orden de detención desde junio, no tenía una eximición de prisión y nunca estuvo detenido por esa causa”, informó por su parte el fiscal Robineau.

El asesino estaba implicado en dos causas de abuso sexual, en hechos cometidos presuntamente contra dos sobrinas (que ahora tienen 19 y 21 años) en 2008 y 2009, aunque recién en mayo de este año fueron denunciados ante la división de Delitos Sexuales de la Policía.

En las dos causas, la Justicia le denegó la eximición de prisión, por lo cual Martínez estaba prófugo, según señaló el fiscal Robineau.

González fue abogado en resonantes casos: representó a la familia de Cristian Schearer, el joven estudiante secuestrado en 2003, por el que se pagó un elevado rescate en dólares, aunque nunca apareció.

También representó a Luis Raúl “Gusano” Menocchio, condenado a prisión perpetua en por el crimen del cineasta Claudio Nozzi en 2005; a familiares de las víctimas del llamando “derrumbe trágico”, que se produjo durante la construcción de un edificio de la Capital correntina en 2012, donde hubo ocho obreros muertos.

También fue querellante en la causa por el crimen de Tatiana Kolodziey, la radióloga que fue violada y asesinada en 2012 en Resistencia, Chaco, por el remisero Juan Cabeza, condenado a prisión perpetua.