El poderoso sol de diciembre vuelve a hacer de las suyas en esta parte de la geografía nacional. En verdad en casi todas, porque el verano ya empieza a sentirse y hace trabajar a los ventiladores y aires acondicionados.

El sábado arrancó soleado, con presencia de algunas nubes en el cielo. La temperatura llegaba a los 23 grados en el arranque de la jornada, con una humedad del 77 por ciento.

El viento era casi imperceptible: a 3 kilómetros por hora soplando desde el sur. Por la tarde los vientos pueden alcanzar mayor intensidad desde el este, rotando hacia el sudeste.

Para este domingo se espera un panorama similar en cuanto al tiempo: cielo parcialmente nublado, con una mínima de 14 grados y una máxima de 30.

Según el Servicio Metereológico Nacional, la inestabilidad vuelve el lunes con probables lluvias hacia la tarde-noche.