De visita por Rosario para acompañar el estreno de su más reciente film ¡Atraco!, los actores Nicolás Cabré y Guillermo Francella pasaron por los estudios de El Tres y charlaron con el periodista Alejandro Simonetto sobre cómo fue filmar en España, analizaron cómo fue trabajar juntos y anticiparon qué podrá ver la gente que se acercar a las salas.

"Es una película muy interesante, nos sentimos orgullosos de haber participado en ella", remarcaron los actores, casi a dúo.

¡Atraco!, que acaba de ser elegida para la sección oficial, fuera de concurso, del próximo Festival de San Sebastián, cuenta la historia de dos argentinos que se ven envueltos en un robo en España. Basada en un caso real, la trama es algo más complicada. El atraco se registra en una prestigiosa joyería de la Gran Vía, en Madrid. Las joyas faltantes habían pertenecido a Eva Perón. Dos trabajadores de la causa peronista fueron enviados a recuperarlas. En el film, Francella encarna al jefe de seguridad de Perón y Cabré a un joven militante peronista.

El guión fue escrito por Marcelo Figueras (Plata quemada), Piti Español y el director, el catalán Eduard Cortés. La filmación se registró en españa. El presupuesto de ¡Atraco!: cuatro millones de euros.

"La hemos probado, vimos la avant premiere en Buenos Aires y en Córdoba. Hoy se da en Rosario. Es unánime la respuesta. Hubo críticas extraordinarias en todos los medios", subrayó Francella. "Tiene una factura técnica extraordinaria. Es un gran film, ojalá que lo disfrute mucho la gente", se entusiasmó.

A la hora de definir el film, el actor y humorista dudó. "Es un thriller de acción, tiene intriga y suspenso. Pero el director quiso colocar unas grageas de humor", contó. Amante del cine de los hermanos Coen, el realizador "quiso atenuar la tensión con humor", remarcó. Además "también hay una historia de amor", aclaró. Y, a esto se suma, "el plus de ser una historia real".

Ambos actores calificaron de "fantástica" e "intensa" la experiencia de la filmación. "Lo único que padecimos el frío, nos tocó la ola polar". Francella confesó: "No había trabajado nunca con Nico, es un gran compañero, lo pasamos bárbaro".

En tanto que Cabré, quien también se mostró feliz con lo que se ve en la gran pantalla, tuvo palabras de admiraicón hacia su coprotagonista. "Se generó química desde el primer dia en la primera escena", precisó. "El hecho de estar lejos, solos, inevitablemente casi todo el día juntos, nos vinculó tanto en lo personal comen lo profesional", sostuvo. Comparó: "Uno cuando filma y está cerca de casa agarra el auto y se va. Esto (trabajar afuera) nos acercó, nos hizo trabajar de otra manera".