Un hombre realizó un intenso, prolongado y costoso tratamiento para volverse heterosexual pero como no lo logró terminó asumiendo que es gay.

El estadounidense Peterson Toscano invirtió 30 mil dólares en una controvertida terapia de conversión, además de encarar tres exorcismo y un matrimonio fallido, según publica el sitio BBC Mundo.

Finalmente, luego de 17 años se intentos infructuosos, a los 47 el hombre resolvió el conflicto entre su fe cristiana y su sexualidad y se convenció de le gustan las personas de su mismo sexo.

La llamada conversión o terapia reparativa es una práctica, a la que se sometió Toscano, que trata de ayudar a las personas a cambiar su orientación sexual.

Hay quienes aseguran que este mecanismo, apoyado ampliamente por iglesias cristianas fundamentalistas, les ayudó a pasar de homosexual a heterosexual, explica el artículo.

Pero en lo que refiere a Toscano –quien se autodenomina un "sobreviviente ex-gay"–, esta práctica no solo no funcionó sino que fue un proceso "sicológicamente dañino".

"Estaba haciendo algo moral y espiritualmente equivocado, por lo que sería castigado en la vida eterna. Así que tenía mucho miedo y un desespero terrible", expresó.