El presidente Néstor Kirchner envió este mediodía una clara señal de apoyo a la ministra de Economía Felisa Miceli, acorralada por una serie de denuncias tras el hallazgo de una bolsa de dinero en el baño de su despacho. Durante un acto en la Casa Rosada, Kirchner le cedió a la cuestionada funcionaria su lugar en el atril para que ella anunciara la creación del Fondo de Garantías de Sustentabilidad de la seguridad social.
En el acto, en el que no hubo alusiones al escándalo generado luego de que se encontrara una bolsa con 60 mil dólares en el Ministerio, participó además el ministro de Trabajo Carlos Tomada y el titular de la Administración Nacional de Seguridad Social (Anses), Sergio Massa.
El episodio se produjo menos de 24 horas después de que el gobierno saliera a defender públicamente a otra funcionaria. Ayer por la tarde, el jefe de Gabinete Alberto Fernández ratificó en su cargo a la secretaria de Medio Ambiente Romina Picolotti, acusada de haber contratados a amigos y familares para trabajos en esa repartición.
Un fondo para que argentina sea confiable
El Fondo de Garantías de Sustentabilidad de la Seguridad Social, cuya creación se anunció hoy, permitirá que haya confiabilidad sobre el futuro de los jubilados, aseguró Miceli. "Para nosotros ese tema es sumamente importante, ya que este fondo permite organizar el pase de los recursos del sistema privado y su futura administración", aseguró.
La ministra explicó que este fondo –que se pondrá en marcha a partir del 15 de septiembre– permite "tener la garantía intemporal para que en la Argentina siempre haya confiabilidad respecto al futuro de nuestros jubilados" y que "no sean variable de ajuste". El fondo, explicó, estará formado por los recursos que ya cuenta hoy la Anses, producto de los ahorros de los años anteriores y aquellos fondos que se transfieran de las entidades privadas.
Asimismo, Miceli observó que el fondo creado "tiende a restablecer un cierto equilibrio entre el sistema público y el
sistema privado". "Estamos a favor de la existencia del sistema privado, pero también creemos que el sistema público debe contar con estos recursos para que pueda garantizarse que en la Argentina los jubilados no sean variables de ajuste de las dificultades fiscales", sostuvo.
Al respecto, se refirió a la reforma de 1994 y evaluó que "desde el punto de vista fiscal impactaba negativamente en las cuentas del Estado; el Estado dejó de recaudar, los recursos previsionales pasaron al sistema privado".
"Ante la falta de estos ingresos por parte del Estado y la necesidad de continuar pagando las jubilaciones, el Estado tuvo una pérdida y esa pérdida la financió con endeudamiento, que se tomaba precisamente de los fondos de las AFJP", señaló.
Por su parte, el titular del Anses puntualizó que "el objetivo central es que nunca más en la Argentina para cerrar las cuentas públicas se use el descuento como se hizo del 13 por ciento a los jubilados". Esto permitirá "reconstruir lo que se destruyó hace 15 años, el pacto intergeneracional, entendiendo que los trabajadores en actividad financian a los futuros jubilados tanto con los recursos de sus aportes y contribuciones como también con los recursos vinculados con los impuestos que pagan", afirmó Massa.