El diputado provincial Antonio Bonfatti presentó este viernes en la Legislatura una iniciativa para lograr la expropiación definitiva, y no temporal como en la actualidad, de las empresas santafesinas recuperadas. De aprobarse, la medida beneficiaría a unas 18 fábricas y cerca de 600 trabajadores distribuidos en diferentes partes de la provincia.

El proyecto de ley establece que se disponga "el carácter de utilidad pública de acuerdo a lo establecido mediante ley 7.534 todo bien mueble e inmueble destinado a la explotación, agropecuaria, industrial y de servicios que estuvieren siendo gerenciados, explotados y administrados por cooperativas de trabajo, siempre que el bien inmueble no sea de propiedad de la cooperativa". En ese marco, aclara que la utilidad pública incluirá "tanto a los inmuebles como las instalaciones, maquinarias, marcas, patentes y toda herramienta destinada a los fines de la actividad".

Se plantea, además, que la expropiación "deberá practicarse mediante ley especial que determine el alcance en cada caso", y que el bien sujeto a expropiación deberá estar incluido en un proceso de quiebra en su etapa liquidativa. Establece, en otro artículo que la cooperativa de trabajadores que se considere incluida en esta norma deberá presentar ante la autoridad de aplicación un estudio integral de viabilidad empresaria. Además, señala que "las cooperativas que reciban los beneficios de la presente ley deberán donar el 2 por ciento del producido a entidades del bien público a elección de la cooperativa con acuerdo del Poder Ejecutivo provincial".

Las empresas recuperadas nacieron a fines de la década del 90, como una forma de resistencia a las políticas de ajuste y exclusión producto de la desindustrialización del país. Este movimiento social consiste en que los propios trabajadoras y trabajadores son quienes llevan adelante el control de las empresas y las fábricas en las que trabajan.

Se calcula que en el país existen alrededor de 160 empresas recuperadas del cierre definitivo y a favor de cooperativas de trabajadores y que este proceso permitió el reestablecimiento de más de 10.000 puestos de trabajo. Del total de empresas recuperadas en Argentina, aproximadamente un 14 por ciento están radicadas en Santa Fe, las cuales emplean a cerca de 600 personas.

En cada caso los trabajadores toman el control de la empresa, recurriendo a distintas instancias para evitar así el retiro de maquinarias o de materias primas indispensables para la continuidad de la producción mientras que, en algunos casos, la recuperación de las fuentes de trabajo y los medios para producir se hace efectiva a partir de una negociación con los propios dueños.