La torre más alta del mundo, "Burj Dubai", con 828 metros de altura, fue inaugurada este lunes por el primer ministro emiratí, jeque Mohamed bin Rashid al Maktum, en Dubai, en una ceremonia con un espectáculo de luz y fuegos artificiales.

Al Maktum anunció que el rascacielos será bautizado como "Torre Jalifa", en honor al presidente de los Emiratos Árabes Unidos (EAU), jeque Jalifa bin Sayed al Nahyan.

Con sus 828 metros, el edificio emiratí desbanca al que hasta ahora ha sido el rascacielos más alto del mundo, el "Taipei 1001" en Taiwán, con 509 metros de altura.

La torre emiratí, con 192 plantas, ha costado 1.500 millones de dólares y se han tardado cinco años en construirla.

Su inauguración coincide con el cuarto aniversario de la llegada al poder de Al Maktum, gobernante de Dubai, uno de los siete emiratos de EAU.

Unos mil agentes de seguridad se han desplazado a la zona donde se encuentra la torre para evitar que se produzcan incidentes.

Mohamed al Abbar, uno de los directores de la compañía inmobiliaria Emaar, que ha construido la torre, dijo hoy a los periodistas que el noventa por ciento de "Burj Dubai" "ya está vendido", lo que se espera que beneficie al mercado inmobiliario del emirato que atraviesa una crisis financiera.

La crisis que afronta Dubai estalló el pasado 25 de noviembre, cuando el consorcio público Dubai World, al que pertenece Emar, pidió una moratoria de sus deudas, calculadas en 26.000 de dólares.

Fuente: EFE

La sorprendente vista desde la cúspide del rascacielo